El hummus se convirtió hace tiempo en uno de los dips más populares del mundo. Originario de Medio Oriente, su preparación tradicional combina puré de garbanzos, pasta de sésamo (tahini), limón, ajo y aceite de oliva. Pero como toda receta clásica, las versiones alternativas no tardaron en aparecer. Entre ellas, hay una que viene ganando protagonismo en redes sociales y cocinas caseras por su sabor intenso y su textura extra cremosa: el hummus de cebolla.












