Las altas temperaturas continúan azotando a Argentina, con máximas que superarán los 38°C en varias provincias y que en algunas zonas alcanzarán los 40°C.
Luego de un martes sofocante, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió que el calor extremo se mantendrá en gran parte del país. Cuándo llega el alivio.
Las altas temperaturas continúan azotando a Argentina, con máximas que superarán los 38°C en varias provincias y que en algunas zonas alcanzarán los 40°C.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), las temperaturas oscilarán entre los 23°C y los 34°C, con vientos de hasta 31 km/h y una humedad del 55%. En las regiones del centro, Córdoba y Santa Fe alcanzarán los 38°C, mientras que San Luis y Santiago del Estero marcarán picos de 39°C y 40°C, respectivamente.
En la zona de Cuyo, Mendoza capital registrará entre 23°C y 37°C, y San Juan escalará hasta los 40°C. Las ciudades del noreste como Corrientes y Posadas (Misiones) estarán bajo alerta amarilla por altas temperaturas, con máximas de 37°C, y Paraná (Entre Ríos) alcanzará los 38°C.
El SMN también emitió alertas amarillas para las zonas cordilleranas de Jujuy, Salta, Catamarca, San Juan y Mendoza. Se prevén tormentas aisladas que podrían incluir precipitaciones intensas, actividad eléctrica, granizo y ráfagas de viento superiores a 60 km/h.
Las lluvias acumularán entre 20 y 40 mm, pudiendo superar esos valores en algunos puntos. En las zonas más elevadas de la cordillera, las precipitaciones podrían convertirse en nieve o granizo.
El SMN prevé que esta ola de calor tendrá su punto máximo entre el jueves y el viernes, antes de la llegada de una masa de aire frío proveniente del sur que desplazará el calor hacia el norte.
En el extremo sur del país, las temperaturas serán mucho más bajas: Ushuaia tendrá una máxima de 10°C, y Río Gallegos, de 14°C. Por otro lado, Rawson (Chubut) y Viedma (Río Negro) alcanzarán máximas más cálidas, de 29°C y 34°C, respectivamente.
Ante esta situación, el SMN insta a la población a tomar precauciones:
El organismo recuerda que no existen medicamentos para prevenir el golpe de calor, pero las medidas clásicas como la hidratación y el descanso son claves para mitigar los riesgos asociados a las altas temperaturas.