Miles de usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se vieron afectados desde la medianoche por un paro sorpresivo de colectivos que dejó fuera de servicio a más de 15 líneas, principalmente en la zona sur del conurbano.
Un paro sorpresivo de colectivos dejó sin servicio a miles de pasajeros en el Área Metropolitana de Buenos Aires desde la medianoche.
Miles de usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se vieron afectados desde la medianoche por un paro sorpresivo de colectivos que dejó fuera de servicio a más de 15 líneas, principalmente en la zona sur del conurbano.
La medida fue convocada por choferes de las empresas MOQSA y El Nuevo Halcón S.A., quienes reclaman por falta de pago de haberes y mejoras salariales, y se mantiene por tiempo indeterminado.
La suspensión de los servicios tomó por sorpresa a los pasajeros que, en plena madrugada, aguardaban el transporte habitual para dirigirse al trabajo o cumplir con trámites.
Desde las primeras horas del viernes, no circulan las líneas 148, 159, 219, 300, 372, 584, 603 y 619, que conectan los partidos de Quilmes, Berazategui, Florencio Varela y Avellaneda con distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires.
A estas se sumaron, con “retención de tareas” o servicio parcial, las líneas 333, 407, 437, 500, 700, 707, 383 y 22, elevando el número total de servicios afectados a dieciséis.
Desde MOQSA (Micro Ómnibus Quilmes S.A.), una de las compañías con mayor presencia en el corredor sur, informaron que la medida se debe a “falta de pago de los haberes correspondientes”.
En tanto, El Nuevo Halcón S.A. -operadora de la línea 148, una de las más extensas del conurbano- comunicó que “los conductores no prestarán servicio por tiempo indeterminado” hasta que se regularicen los sueldos atrasados.
Los choferes, nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA), reclaman que los empresarios no depositaron los salarios completos del mes y denuncian un incumplimiento reiterado de los compromisos de pago asumidos por las empresas en octubre.
Aunque el gremio no anunció formalmente una huelga general, los delegados sostienen que se trata de una “abstención de tareas” avalada por las bases en asamblea.
El paro afectó directamente a miles de pasajeros que utilizan a diario las líneas involucradas. En distritos como Berazategui, Florencio Varela y Quilmes, el transporte público quedó virtualmente paralizado, con largas filas en las paradas y congestión en las estaciones ferroviarias de los ramales Roca y Constitución.
El servicio de Trenes Argentinos reforzó parcialmente la frecuencia de algunos ramales, aunque no logró absorber la demanda. En redes sociales, el hashtag #ParoDeColectivos se convirtió rápidamente en tendencia, con cientos de mensajes que reflejaron la frustración de los pasajeros.