A diferencia de otras ocasiones, en esta oportunidad no fue necesario que sus ayudantes, Claudio Úbeda y Juvenal Rodríguez, tomaran el mando de las prácticas. El plantel contaba con jornada libre tras el partido, lo que alivió la planificación en medio de la ausencia momentánea del DT.
La situación generó inquietud porque no es la primera vez que Russo necesita atención médica en las últimas semanas. A principios de septiembre, el entrenador había estado internado en el instituto Fleni durante una semana debido a una infección urinaria que se complicó.
Esa internación le impidió estar al frente de los entrenamientos del plantel y motivó que recién se reincorporara varios días después, una vez que recibió el alta el 5 de septiembre. Su regreso a las prácticas fue paulatino y recién el jueves siguiente volvió a dirigir en la Bombonera, en la previa al viaje para enfrentar a Rosario Central.
En aquella oportunidad, la noticia de su estado de salud generó versiones que el propio técnico desmintió con firmeza. “Hubo muchos que dijeron tonterías. El que sabe sobre su salud es uno mismo”, lanzó en conferencia de prensa, molesto con los rumores que circularon.
¿Cómo sigue la situación de Russo en Boca?
Por ahora, se espera que esta internación sea breve y que Russo pueda recibir el alta en las próximas horas. El cuerpo técnico de Boca mantiene la planificación de la semana, con la intención de que el entrenador pueda retomar el trabajo lo antes posible.
Más allá de las señales de debilidad que motivaron la aplicación de suero, los estudios son parte de los controles programados para monitorear su evolución. La intención del club y del propio DT es minimizar riesgos, sobre todo teniendo en cuenta el desgaste que implica la competencia y el estrés que conlleva dirigir a un equipo como Boca.
En paralelo, el empate ante Central Córdoba dejó un sabor amargo en lo futbolístico, pero la atención del plantel se trasladó rápidamente hacia la salud de su técnico. Aunque el jueves volverán a los entrenamientos, los jugadores siguen de cerca la evolución de Russo, quien fue ovacionado en la Bombonera en la última presentación del equipo.
La expectativa está puesta en que pueda reincorporarse en los próximos días y continuar al frente del plantel sin mayores complicaciones. En Boca confían en que se trate de un control más dentro de la recuperación que inició semanas atrás.
De esta manera, la salud de Russo vuelve a estar en primer plano, mientras Boca atraviesa un tramo exigente de la temporada en el que necesita estabilidad tanto dentro como fuera de la cancha.