El empate agónico que sufrió Boca ante Fortaleza prácticamente asegura que el equipo dirigido por Diego Martínez disputará los 16avos de final de la Copa Sudamericana si termina segundo en el Grupo D, una situación que se definirá en la última jornada frente a Nacional Potosí. A pesar de que el partido está programado para más de un mes en el futuro, ya se vislumbra un problema potencial debido a la posible ausencia de varias piezas clave del plantel.