Pero la complicidad no quedó solo en esa entrevista. Christine insinuó que había más para contar, diciendo en tono de broma: “Ya te lo cuento luego, porque ahora no creo que se pueda grabar”. Este intercambio dejó claro que la química entre ambos fue instantánea.
Más allá del tono ligero de la conversación, Franco también compartió su emoción por este importante hito en su carrera. Después de mudarse a Europa a los 14 años para perseguir su sueño de llegar a la Fórmula 1, comentó: “Es algo para lo que trabajé desde muy chico. Hay altibajos, como en todo, pero los sacrificios valieron la pena. Hoy en día, llegar a este objetivo me genera una emoción mucho más grande”.