Para el Estado y la Anses, la prórroga significará un esfuerzo de $ 8.000 millones en junio.
La resolución del organismo precisa que los intereses generados sobre saldo deudor se aplicarán una vez vencido dicho término, durante el cual los beneficiarios alcanzados por esta medida no podrán solicitar el otorgamiento de nuevos créditos del Programa.
Además, amplía el plazo de amortización en 24 meses que se agrega al término original pactado en los créditos que fueran otorgados a partir del 26 de marzo y hasta el 21 de abril de 2020, a efectos de que la cuota que se le debite mensualmente de sus haberes resulte igual o inferior a la que se determinó en las condiciones originales del contrato.
De todos modos, la normativa aclara que el titular de un crédito que considere que las nuevas condiciones contractuales no le resultan beneficiosas, tiene la facultad de solicitar a la Anses que se mantengan las condiciones pactadas inicialmente debiendo notificar su voluntad en forma fehaciente.