Máximos y mínimos
El máximo histórico de $41,80 de septiembre estuvo cerca de repetirse la semana pasada, cuando la cotización cerró en $40,70 según el promedio del BCRA.
Sin embargo, a pesar de que la cotización del dólar fue similar, no preocupó de igual manera a la entidad oficial porque la banda superior ya había aumentado casi $6.
En pocas palabras: en octubre, si el dólar subía $3, el Banco Central podía salir a vender dólares para calmar la suba. Para que se repitiera ese mismo escenario la semana pasada, la cotización tendría que haber subido $9, el triple que en octubre.
Los primeros días de octubre, el dólar prácticamente estaba en el límite superior. Ahora, el dólar debería subir casi $10 para que el BCRA salga a vender reservas para bajar el precio de la moneda estadounidense.
Sin embargo, aunque está lejos del límite superior, el BCRA subió 5 puntos porcentuales la tasa de licitación de las Leliq, llevándola a casi 50%. Esto logró que la cotización del dólar volviera a rozar el mínimo de la zona de no intervención.
Esto demuestra que la suba igual preocupa al Banco Central. Es porque la cotización del dólar afecta directamente a la inflación, que estaría cerca del 3,5% en febrero. La suba del tipo de cambio tiene un efecto de traslado a precios que acelera el proceso inflacionario.
Y ese es, para Sandleris y equipo, el verdadero mal a vencer.