Brasil superó los 4.000 muertos en 24 horas. La pandemia está fuera de control en ese país (Foto: AP).
La pandemia en Brasil no tiene control. Las cifras impactan cada día. En las últimas 24 horas murieron 4.195 personas, un nuevo y desgraciado récord. Y al mismo tiempo se registraron 86.900 nuevos contagios. "Es un Fukushima biológico. Es un reactor nuclear que ha desatado una reacción en cadena y está fuera de control", dijo Miguel Nicolelis, médico brasileño y profesor de la Universidad de Duke.
El especialista utilizó una comparación muy gráfica para definir la gravedad de la crisis sanitaria. El 11 de marzo de 2011, un tsunami provocó, como consecuencia de la invasión del agua de mar, la explosión de varios reactores de la central nuclear de Fukushima. De inmediato, debió evacuarse a toda la población ubicada en un radio de 20 kilómetros.
Brasil es el segundo país con más muertos y con más contagios, superado solo por Estados Unidos. Marzo tuvo el récord de muertos para un mes desde que comenzó la pandemia: 66.000 personas. Pero abril puede ser peor todavía.
En los primeros seis días del mes, el número de fallecidos asciende a 15.432. Si se mantiene esa tendencia, va camino a sobrepasar la catastrófica cifra del mes anterior.
Por eso la definición del médico Nicolelis. Con un promedio diario de 2.757. muertos, "el Fukushima biológico" puede hacer que, en poco tiempo más, Brasil supere a Estados Unidos tanto en contagios como en número de muertos.
Desde la llegada de Joe Biden, la Casa Blanca puso todo su esfuerzo en una vacunación masiva. El objetivo: llegar a la inmunidad de rebaño para la fiesta nacional del 4 de julio. Ya se encuentra con un ritmo diario de 4 millones de personas vacunadas. Así, llegó a 167.187.795 de personas vacunadas (al menos una dosis), o sea, el 50% de la población.
Brasil, en cambio, tiene un grave problema para conseguir las vacunas que Bolsonaro anunció tempranamente. Hasta el momento, solo logró aplicar 22.582.923 de dosis. Representa apenas el 10,33% de la población.
Sin embargo, en su cuenta de Twitter, el presidente exhibe la magra campaña vacunatoria como un éxito.
En sus habituales contactos con partidarios en los alrededores de la residencia oficial, el mandatario volvió a fustigar las cuarentenas como una estrategia para disminuir la circulación del virus.
"¿Con ese tipo de medidas que va a pasar?", se preguntó Bolsonaro, y continuó: "Cuando te quedás en casa, ¿que hacés?".
"Dudo que no aumentes de peso. Hasta a mí me creció un poquito la barriga. Todo va a ser peor", remató. El presidente ignoró por completo los reclamos de una mujer que, en dos oportunidades, le pidió una reflexión sobre el número de 4.000 muertos en un día.
Los científicos del Observatorio Covid-19 Fiocruz, el más importante del país, advierten que si no se toman importantes medidas de contención, las cosas irán peor para. El virus se mantiene en alta circulación y los sistemas de Salud comienzan a colapsar en las grandes ciudades, como en San Pablo. Las camas de terapia intensiva se ocupan en niveles muy altos. Y la llegada de vacunas, como en tantos otros países, se demora.
Con este panorama, la advertencia es clara. Brasil, en poco tiempo más, puede ser el país mas afectado en el mundo por la pandemia.
