Internacional

Boicot diplomático deportivo: ningun funcionario del Gobierno de los Estados Unidos asistirá a los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing

A pesar de la restricción, señalaron que todos los atletas estadounidenses podrán competir en el evento multideportivo internacional.
Todos los atletas estadounidenses todavía podrán competir

Todos los atletas estadounidenses todavía podrán competir, pero ningún funcionario del gobierno de Estados Unidos asistirá al evento.

Estados Unidos cumplió su promesa y la Casa Blanca anunció este lunes la decisión de hacer un boicot diplomático contra los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing 2022. La decisión fue anunciada por la secretaria de prensa del gobierno de Joe Biden, Jen Psaki, y también esta determinación permanecerá para los Juegos Paralímpicos.

"El gobierno de Biden no enviará ningún diplomático, dado el genocidio en curso de la República Popular China y los crímenes de lesa humanidad", anunció Psaki.

Un boicot diplomático significa que todos los atletas estadounidenses todavía podrán competir en los JJOO, pero ningún funcionario del gobierno asistirá al evento.

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"Como le dijo el presidente Biden al presidente Xi, defender los derechos humanos está en el ADN estadounidense...seguiremos tomando acciones para promover los derechos humanos en China y más allá", agregó Psaki.

"Los atletas del equipo de Estados Unidos tienen nuestro apoyo completo, y los estaremos apoyando desde casa, pero no contribuiremos a la fanfarria de los Juegos", precisó la portavoz de Biden.

Al mismo tiempo, la Casa Blanca ha decidido no prohibir la participación de los atletas estadounidenses, algo que habría supuesto un boicot completo a los Juegos, porque no quiere "penalizar" a los deportistas que llevan meses o años entrenando para prepararse para la cita olímpica, agregó.

La respuesta China al boicot de Estados Unidos

Previo a confirmarse el boicot estadounidense, el vocero de la Cancillería china, Zhao Lijian, acusó horas antes a Estados Unidos de politizar el deporte.

En declaraciones a la prensa en una conferencia diaria, Zhao dijo que el boicot sería una “provocación política directa”, aunque no dio detalles sobre cómo respondería China.

El envío de delegaciones de alto nivel a los torneos olímpicos es una tradición de EEUU y otros países. El entonces presidente George W. Bush asistió a la inauguración de los JJOO de verano de 2008 en Beijing. La actual primera dama, Jill Biden, lideró a la comitiva estadounidense a los Juegos de verano en Tokio este año y el esposo de la vicepresidenta de EEUU, Doug Emhoff, lideró una delegación a los Juegos Paralímpicos.

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El boicot surge en momentos cuando Washington intenta estabilizar sus accidentadas relaciones con Beijing y al mismo tiempo mantener su estrategia en cuanto a tensiones comerciales y conflictos sobre las acciones de China en Taiwán, derechos humanos, Hong Kong y el Mar de China Meridional.

Australia, cuya relación con China se rompió por varias disputas, también planteó la posibilidad de un boicot diplomático.