Para Amorim, la conversación mantenida entre Milei y Bolsonaro es ajena a la relación bilateral entre los dos países.
"Esa llamada no afecta al gobierno brasileño. No impedirá que tratemos la relación con Argentina como una relación de Estado", explicó Amorim, excanciller y exministro de Defensa.
Según Amorim, la relación entre Milei y Bolsonaro solamente causará problemas si se registran "interferencias internas".
Amorim citó que Lula se ofendió personalmente debido a que Milei lo llamó "ladrón" y "comunista furioso" durante entrevistas ofrecidas en la campaña electoral, después de que el líder del Partido de los Trabajadores (PT) exhibió respaldo a la candidatura del ministro de Economía, Sergio Massa.