IMPENSADO CAMBIO

Más restricciones: ahora a los autos diesel

Este endurecimiento normativo responde a los compromisos de reducción de emisiones contaminantes y gases de efecto invernadero, y pretende fomentar una transición hacia vehículos más limpios, eléctricos e híbridos.

Redacción A24
por Redacción A24 |
Más restricciones: ahora a los autos diesel

La lista de ciudades con Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) sigue creciendo, y se estima que más del 60% de la población española vivirá bajo estas nuevas restricciones de circulación en poco más de dos años. La normativa medioambiental, impulsada por la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, apunta directamente a los vehículos con etiqueta B de la Dirección General de Tráfico (DGT), principalmente los diésel de más de 10 años y los gasolina matriculados antes de 2007, que pronto tendrán prohibido acceder a los centros urbanos de decenas de municipios.

Más de 10 millones de vehículos quedarán afectados

La magnitud de este cambio es enorme: casi 10 millones de vehículos en circulación tienen hoy la etiqueta B amarilla de la DGT, según estimaciones oficiales. Esta categoría incluye a todos los coches y furgonetas matriculados entre 2006 y 2015 (diésel) y a los gasolina anteriores a 2007. Representan más de un tercio del parque automotor español.

Hasta ahora, solo un pequeño grupo de ciudades ha activado sus ZBE, unas 30 en total, pero la legislación obliga a que más de 150 municipios con más de 50.000 habitantes cuenten con estas zonas. El Gobierno ha advertido que retirará las ayudas estatales al transporte público a todos los ayuntamientos que no cumplan con esta normativa.

Este endurecimiento normativo responde a los compromisos de reducción de emisiones contaminantes y gases de efecto invernadero, y pretende fomentar una transición hacia vehículos más limpios, eléctricos e híbridos.

Nuevas restricciones: San Fernando y Las Palmas dan el siguiente paso

En los últimos días, San Fernando (Cádiz) se ha sumado a esta tendencia. Desde el 1 de enero próximo, prohibirá el acceso nocturno (de 20:00 a 8:00) a los vehículos con etiqueta B en su ZBE, y desde enero de 2027 endurecerá aún más la medida, ampliando la franja de restricción de 15:00 a 8:00 horas.

Por su parte, Las Palmas de Gran Canaria presentará este mismo mes ante el Pleno municipal el reglamento de su futura ZBE. Según lo previsto, antes de que acabe el año solo podrán circular en esta zona los vehículos con etiquetas ECO y 0 emisiones, mientras que los vehículos con etiquetas B y C tendrán prohibido el paso, salvo excepciones muy puntuales, como taxis o turismos particulares que transporten a menores con discapacidad a centros escolares.

La norma es una de las más restrictivas de España hasta el momento.

Bilbao, pionera entre las grandes capitales

Bilbao se convirtió este verano en la primera gran capital en extender estas limitaciones de circulación a todos los vehículos con etiqueta B. Su ZBE prohíbe el acceso a estos coches en días laborables de 7:00 a 20:00 horas, y las infracciones ya se sancionan con multas de hasta 200 euros, de acuerdo con la Ley de Tráfico vigente en todo el país.

Este movimiento marcó un precedente importante y aceleró los debates en otros consistorios urbanos que hasta ahora habían mostrado reticencias a aplicar estas medidas.

Madrid, Getafe y Estepona: las primeras en sancionar

Madrid ha sido pionera con su ZBE de Distrito Centro (ZBEDEP), donde ya sanciona a los vehículos con etiqueta B que circulan sin autorización. Getafe y Estepona también han implementado medidas similares, prohibiendo el paso y aplicando multas a los conductores que incumplen la normativa.

La hoja de ruta ya está marcada para otras urbes: en 2027 se sumarán Málaga y Palma de Mallorca, mientras que San Sebastián lo hará en 2028, siguiendo el calendario de implantación progresiva establecido en sus planes de movilidad sostenible.

Cataluña impondrá la prohibición total desde 2028

Una de las regiones que más avanzará en la restricción de los vehículos con etiqueta B será Cataluña. El nuevo Plan de Calidad del Aire de la Generalitat contempla que, a partir de 2028, todos estos vehículos tengan prohibido el acceso a cualquier Zona de Bajas Emisiones de la comunidad.

Esto afectará a alrededor de 25 ciudades catalanas, incluyendo Barcelona y su área metropolitana. Además, el plan prevé que, ya desde 2026, estas restricciones entren en vigor automáticamente cuando se activen los protocolos anticontaminación por mala calidad del aire, lo que acelerará el proceso de retirada de estos vehículos del parque circulante.

Una transición forzada para millones de conductores

La implantación generalizada de las ZBE supone un cambio drástico en los hábitos de movilidad urbana de millones de españoles. Quienes dependen de vehículos antiguos con etiqueta B tendrán que optar por alternativas de transporte público, cambiar de vehículo o buscar autorizaciones excepcionales.

Para muchos ciudadanos de rentas medias y bajas, esto representa un desafío económico importante, ya que el coste de adquirir un vehículo nuevo con etiqueta ECO o 0 emisiones sigue siendo elevado. En este sentido, varios colectivos y asociaciones de consumidores han reclamado ayudas específicas y planes de renovación del parque automotor accesibles, especialmente para autónomos y trabajadores que usan sus vehículos a diario.

El objetivo: reducir emisiones y mejorar la calidad del aire

El trasfondo de esta política es reducir drásticamente las emisiones contaminantes en los centros urbanos, responsables de buena parte de la contaminación por dióxido de nitrógeno (NO), generada principalmente por los vehículos diésel.

Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, más de 20.000 muertes prematuras al año en España están asociadas a la contaminación atmosférica, por lo que la implantación de ZBE se considera clave para mejorar la salud pública y cumplir con las directrices de calidad del aire de la Unión Europea.

Las autoridades insisten en que la implantación de estas zonas será progresiva y acompañada de campañas informativas, aunque admiten que las sanciones serán inevitables para quienes no respeten las nuevas limitaciones.

El mapa de restricciones sigue creciendo

De aquí a 2027, la mayoría de las grandes y medianas ciudades españolas estarán cubiertas por Zonas de Bajas Emisiones. Algunas, como San Sebastián o Palma de Mallorca, ya han fijado fechas concretas; otras, como Las Palmas, están en proceso de aprobación regulatoria.

El ritmo de implantación se ha acelerado debido a las presiones del Gobierno central y a la necesidad de cumplir compromisos climáticos europeos.

Con ello, más del 60% de la población española vivirá en municipios donde los vehículos con etiqueta B ya no podrán circular libremente. Se trata de una transformación estructural de la movilidad urbana en España, sin precedentes en su escala y velocidad de implementación.

Un futuro sin coches contaminantes en los centros urbanos

La tendencia es clara: las ciudades españolas caminan hacia un futuro sin vehículos contaminantes en sus núcleos urbanos. Aunque el proceso genera resistencia social y preocupación económica, el consenso institucional apunta a que no hay marcha atrás en la transición ecológica del transporte.

En paralelo, los fabricantes de automóviles aceleran el desarrollo de modelos eléctricos e híbridos, mientras que los ayuntamientos trabajan en planes de transporte público reforzado y redes de movilidad activa (bicicletas y patinetes eléctricos).

Lo que hoy parece una restricción parcial, en menos de una década será la norma en toda España: centros urbanos libres de emisiones, donde solo podrán circular vehículos eléctricos, híbridos enchufables o de hidrógeno.

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