Un joven de 23 años murió este domingo luego de quedar prácticamente asfixiado por una mala maniobra con el arnés con el que podaba un árbol, en el barrio de Saavedra. La tragedia luego desencadenó otra: la hermana de la víctima, en un presunta crisis nerviosa, quiso abrir la puerta de la ambulancia en la que trasladaban al hombre al hospital y, en el forcejeo con un policía que intentó evitar la maniobra, el efectivo cayó al asfaltó y quedó inconsciente.












