El relato de los vecinos
Una vecina identificada como Analía, que vive a pocos metros del lugar, fue una de las primeras en acercarse tras el disparo. “Directamente no le dijeron nada. La quiosquera me contó que le dijo dos palabras y le disparó en el hombro. Agarraron la cartera, la tiraron al lado del auto y salieron corriendo los tres”, relató.
Otro vecino contó que los ladrones escaparon hacia una calle lateral, donde fueron vistos por otros residentes que luego dieron aviso a la Policía. Sin embargo, la respuesta policial y de los servicios de emergencia estuvo lejos de ser inmediata.
La ambulancia nunca llegó
Los testimonios coinciden en que la ambulancia nunca se presentó en la escena. Fueron los propios vecinos quienes cargaron a Rita en un vehículo particular y la trasladaron de urgencia a un centro médico cercano.
“Cuando la sacamos del auto, todavía tenía puesto el cinturón de seguridad. No reaccionaba, se había orinado encima. Me parece que ya no estaba con vida”, contó Analía.
La Policía, según indicaron testigos, tardó cerca de 20 minutos en arribar. La demora provocó momentos de tensión entre los vecinos y los efectivos, que fueron increpados por la aparente falta de urgencia ante una situación crítica.
Villa Luzuriaga es una localidad donde los vecinos denuncian robos constantes en cualquier horario. “Yo vivía a dos cuadras y siempre fue igual. No podés salir tranquilo. Te roban en cualquier momento del día”, aseguró Analía.
Un delincuente detenido por el crimen de Rita
Ni el cinturón llegó a sacarse: así fue el ataque mortal contra Rita ante la mirada de su hijo.
Una víctima en estado crítico
En el centro de salud, los médicos intentaron reanimarla, pero las lesiones provocadas por el proyectil fueron irreversibles. La noticia de su muerte fue comunicada poco después a su esposo, quien llegó acompañado de allegados y recibió el impacto de la tragedia en silencio.
Rita Suárez era madre de dos hijos y conocida en el barrio por su trato amable. El hecho dejó a la comunidad sumida en la indignación y el temor.
La investigación y los detenidos
La investigación, a cargo del Dr. Inzua del fuero penal juvenil, logró rápidamente identificar a los tres sospechosos gracias a imágenes de cámaras de seguridad y datos recabados por la Policía. Se determinó que se trataba de dos menores de edad y un adulto.
Dos de ellos fueron detenidos a las pocas horas. Sin embargo, el tercer implicado, identificado como Máximo Leguizamón, de 17 años, sigue prófugo. Este joven fue captado por cámaras de un supermercado chino, ubicado a unos 600 metros de la escena del crimen, donde compró un agua mineral usando su billetera virtual, lo que permitió a las autoridades conocer su identidad y domicilio.
Materiales confiscados a los asesinos de Rita
Los materiales confiscados a los delincuentes que mataron a Rita.
Allanamiento en Rafael Castillo
En la noche del jueves, la Policía realizó un allanamiento en la vivienda de Leguizamón, ubicada en Rafael Castillo. Aunque no lo encontraron, hallaron ropa manchada con sangre que habría utilizado durante el asalto.
La pista más firme es que el menor continúa oculto en la zona oeste del conurbano, protegido por allegados. Las fuerzas de seguridad mantienen operativos en distintos puntos para dar con él.