La crisis por la inflación se expande como una mancha hacia el interior del Frente de Todos, donde los kirchneristas más duros comparan al Presidente y al Gabinete de Alberto Fernández con “el gobierno de 5 amigos que le escriben el diario de Yrigoyen” y muchos funcionarios admiten en voz baja la nueva crisis del sistema presidencialista, donde los vicepresidentes operaron contra la gobernabilidad al romper la formula presidencial elegida por el voto popular.
El límite es el mes de mayo. En ese clima de extrema tensión, hay un principio de acuerdo con el kirchnerismo para concentrarse en la crisis económica. Por ahora, Alberto no está dispuesto a entregar Martín Guzmán, pero ya admite entre los suyos, que si no resulta bien la primera revisión del programa acordado con el FMI en mayo, frente a las presiones del kirchnerismo, deberá cambiar de ministro de Economía.
La condición de Alberto es buscar una fórmula de consenso para salir de la crisis política en la que quedó metida el Frente de Todos. Esa postura exhibieron los intendentes de La Cámpora a Máximo Kirchner en una reunión la semana pasada en la que le pidieron al hijo de la vicepresidenta, que bajen el tono de las críticas al gobierno nacional.
Uno de los dirigentes más cercanos a Cristina, el senador Oscar Parrilli, formuló declaraciones similares esta semana: dijo que los que no quieren la unidad del Frente de Todos, son los que perdieron en 2019.
También hay un pedido de funcionarios de segundas líneas de La Cámpora, que tienen cargos en la gestión, que advierten sobre las consecuencias de seguir operando en contra de Alberto Fernández. Temen que el camino de una ruptura o mayor debilidad del Gobierno, se refleje en una segura derrota electoral del kirchnerismo y de todo el peronismo en 2023.
Crisis del Gobierno: ¿Se viene un nuevo cambio de gabinete?
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En los despachos de la Casa Rosada hoy no se está hablando de un adelanto de las elecciones de 2023 sino de cómo en abril y mayo se empieza a cambiar el rumbo por la preocupación económica. Todo el Gobierno está concentrado en discutir cómo se empieza a bajar la inflación para que no supere el 50% anual.
En la Casa Rosada son optimistas en la gestión económica. Creen que se van a cumplir los pasos y metas firmadas por Guzmán con el FMI. Pero no se puede jugar todo a eso. Los pronósticos pueden fallar.
Por eso, la primera reacción de Alberto a las críticas del kirchnerismo fue ignorarlas. Pero algunos le empezaron a decir en su entorno que eso es jugar con fuego, porque si no logran estabilizar la economía el Gobierno quedará mal parado, al borde del precipicio.
Según las encuestas que circulan en la Casa Rosada, a la gente no le importa nada la interna política. "Lo que le importa es el supermercado, la inflación, los salarios, saber cuánto les van a aumentar las tarifas y cuánto les queda de sueldo", reconoció una funcionaria consultada por a A24.com.
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Todesca sostiene que para este año los pronósticos de crecimiento son en torno al 8%. (Foto: Jefatura de Gabinete)
Si finalmente no alcanzan los objetivos y Guzmán sale mal parado, el Presidente piensa en Cecilia Todesca, la ex vicejefa de gabinete y economista de su máxima confianza.
En las negociaciones que se dan todos los días entre las segundas líneas del albertismo y el cristinismo, trascendió que en caso de llegar a un acuerdo con Cristina para evitar la ruptura del Frente de Todos, Alberto entregaría a Guzmán pero insistirá en poner a un economista propio. Dicen que pedirá también a cambio, 2 de las 4 cajas del Estado que hoy maneja La Cámpora: El PAMI e YPF.
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Hoy La Cámpora tiene la dirección de PAMI, ANSES, YPF y Aerolíneas Argentinas. Luana Volnovich, la titular del PAMI igual que el jefe de Gabinete, Juan Manzur, son otros de los mencionados en la lista de los posibles fusibles.
Las fuentes indican que si llega a haber algún cambio de Gabinete, Guzmán podría pasar a una Secretaría Finanzas para dedicarse exclusivamente al seguimiento de la refinanciación de la deuda con el FMI y el Club de París.
Pero esas por ahora son solo especulaciones de una negociación que comienza a destrabarse de a poco, que está en fase 1. "Esas discusiones pertenecerían a una eventual fase 3", ironizan en los pasillos de la Casa Rosada.
La negociación para volver a reunir a Alberto y a Cristina
Hay bronca en el entorno de Alberto Fernández porque dirigentes de Kicillof, periodistas y economistas de la Cámpora siguen operando y limando al Presidente, dicen.
Entre quienes hablan por teléfono, se juntan y negocian los términos de un reencuentro entre Alberto y Cristina se destacan muchos funcionarios de segundas líneas, además de Wado De Pedro, Santiago Cafiero, Fernando Navarro e intendentes del PJ ortodoxo y de La Cámpora.
Lejos del diálogo por ahora están los más duros de uno y otro lado: Oscar Parrilli, Anabel Fernánez Sagasti por el lado de Cristina, y Juan Manuel Olmos, o Juan Manzur y Gustavo Beliz y Julio Vitobello, por el de Alberto.
"Wado sigue siendo un puente pero mantiene un equilibrio", dicen en la Casa Rosada pero admiten que así como avaló el acuerdo con el FMI también le marcó la cancha.
El ministro del Interior, que también es el ministro político del Gobierno, es el segundo en importancia detrás del jefe de Gabinete porque es quien maneja la relación con todas las provincias y municipios, avala el diálogo que está llevando adelante con empresarios y sindicalistas, pero a la vez, reclama medidas económicas para reforzar los salarios.
El jueves en otro mensaje crítico a la política económica del Gobierno, De Pedro advirtió en declaraciones radiales que “hay diferencias” en por la política económica de Guzmán.
Desde el albertismo se quejan porque La Cámpora dice que quiere más medidas pero no dicen cómo financiarlas. "Dicen: quiero más emisión, que sigan con subsidios a tarifas, piden otro IFE, pero no tenemos cómo financiarlo sin que resulte inflacionario", señalan fuentes en el entorno de Alberto Fernández a A24.com.
La convocatoria a 19 gobernadores -conjunta entre Wado De Pedro y Juan Manzur con el aval de Alberto- fue un primer buen gesto de unidad.
Ministro del Interior, Eduardo De Pedro y gobernadores tras la reunión en Casa Rosada por la coparticipación y el conflicto con CABA.jfif
Albertistas vs. Alberto
En el propio entorno de Alberto Fernández se quejan de su líder. Dicen que por momentos avanza como un estadista y de repente se transforma en un fuerte creador de memes y termina debilitándose a sí mismo con furcios discursivos.
3 días de acampe piquetero frente al Ministerio de Desarrollo Social, rumores de posibles cortes de energía, faltante de gas y combustible, son síntomas que hacen temer una eventual ruptura de la alianza de Gobierno.
Todo eso se suma hoy a la incertidumbre política que algunos comparan con un estado de anarquía y hasta piden un adelantamiento de las elecciones. ¿Entre diablos y psicólogos, estaremos ante una profecía autocumplida?