Según los registros oficiales, la VUF gestionó más de 1.500.000 casos desde su implementación en 2017, con casi 80.000 reclamos ingresados solo en lo que va de 2025. La Subsecretaría resaltó que “se trata de un canal que amplía la cobertura y fortalece la relación entre los consumidores y las autoridades de aplicación”.
Un sistema de arbitraje adaptado al entorno digital
La Disposición Nº 892/2025 introduce cambios en el Sistema Nacional de Arbitraje de Consumo. Entre las modificaciones, se destacan las audiencias digitales, la reducción de plazos procesales y la incorporación de trámites electrónicos para simplificar la operatoria.
El texto también incorpora la figura del Árbitro de Emergencia, creada para garantizar la continuidad de los procesos en caso de ausencias o recusaciones. Además, se habilita el uso de herramientas de inteligencia artificial como apoyo en la gestión de reclamos.
“El SNAC es voluntario, de alcance federal y sus decisiones tienen carácter vinculante, ofreciendo una alternativa eficaz a la vía judicial que favorece tanto a consumidores como proveedores”, indicó la Subsecretaría. El organismo remarcó que esta vía busca ofrecer soluciones más rápidas y menos costosas que las judiciales tradicionales.
El Defensor del Cliente y la agenda de autorregulación
La Disposición Nº 893/2025 actualiza el régimen del Defensor del Cliente, que se presenta como una vía de resolución directa y voluntaria de conflictos de consumo. La medida “flexibiliza su adopción, habilita medios digitales para su implementación y reafirma los principios de celeridad y trazabilidad”, señaló el comunicado oficial.
De acuerdo con la Subsecretaría, el régimen apunta a “promover mejores prácticas empresariales, facilitar soluciones sin judicialización y atenuar el impacto burocrático en las autoridades de aplicación”. La figura permite que las empresas gestionen reclamos a través de defensores internos o externos, como parte de un esquema de autorregulación.
El organismo sostuvo que la recuperación de este mecanismo busca consolidar un espacio de diálogo directo entre consumidores y compañías. “El Defensor del Cliente contribuye a descomprimir los canales administrativos y a generar soluciones rápidas y efectivas”, afirmó.