Javier Milei se distancia de los reclamos de la UIA que reclama baja de impuestos para poder competir con la apertura de importaciones. ¿En qué quedó el diálogo del Gobierno con empresarios y sindicatos al Consejo de Mayo, para avanzar en las reformas laboral e impositiva?
Javier Milei se distancia de los reclamos de la UIA que pide baja de impuestos y avanza con la apertura de importaciones. Foto: Archivo.
Ni el presidente Javier Milei, ni el ministro de Economía Luis Caputo aceptaron la invitación al evento anual de la Unión Industrial Argentina este martes, en medio de cruces por la apertura de importaciones y el pedido de la entidad empresaria de igualar las condiciones tributarias que otros países ofrecen a sus industrias. El acto de la UIA lo cierra su presidente, Daniel Funes de Rioja.
Según confirmaron fuentes del Gobierno a A24.com, Milei no asistirá por cuestiones de "agenda". El presidente tiene previsto hablar este martes por la tarde en un acto junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en el Salón Blanco de la Casa Rosada,
Pero lo cierto es que el faltazo de representantes del gobierno a la 30° Conferencia Anual de la UIA que nuclea a las industrias más importantes del país, se produce en un contexto de reclamos de industriales, que reclamaron medidas para poder competir con los productos que empiezan a ingresar al país del exterior, producto del avance en las desregulaciones y apertura de importaciones que avanza el gobierno, a través del Ministro Federico Sturzenegger.
En el cronograma oficial solo aparece confirmado el Secretario Coordinador de Producción de la Nación, Juan Pazo. El funcionario del Palacio de Hacienda participará de un conversatorio para “abordar los ejes estratégicos del gobierno nacional para el desarrollo del sector industrial en los próximos cuatro años y la agenda de competitividad”.
Entre los invitados presentes estuvo el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien destacó el rol de los empresarios y la importancia de articular las nuevas tecnologías con la industria: "Gracias por no aflojar porque invertir y generar empleo es para patriotas", dijo en su discurso el dirigente de PRO.
En su discurso de apertura, Funes de Rioja, reclamó la ausencia del ministro de Economía, Luis Caputo y del presidente de la Nación, Javier Milei. “Hubiéramos querido que vinieran” dijo, y agregó que las ausencias “están lejos de vaciarnos la reunión porque acá hay 1100 industriales mirando su futuro, la realidad el contexto para tener diagnóstico”.
El jefe de la UIA replicó las críticas del Gobierno a los empresarios: "no queremos protección, queremos respeto", dijo Funes y apeló al reclamo de las PYMES para que el Gobierno y la oposición impulsen “una ley pyme y el RIGI pyme que podrían ir en el mismo paquete", aunque advirtió que las urgencias para el Ejecutivo y el Congreso sobre el final del año legislativo, son otras.
La profunda recesión que se vivió entre el último trimestre del 2023 y el primero del 2024 generó un masivo cierre de fábricas y la pérdida de unos 30.000 empleos en el sector, según informes dados a conocer por la UIA.
Las pequeñas y medianas empresas le reclaman a la conducción de la Unión Industrial Argentina más dureza en los reclamos al Gobierno y el mensaje se lo hizo llegar Funes de Rioja a Milei: “Si hay fenómenos de apertura irracional e indiscriminada, vamos a ir señalándolos. Nos preocupa la llegada de una ola importadora, y hay que atajar rápidamente el aspecto tributario”, dijo el presidente de la entidad.
Luego de varios encontronazos en las reuniones del Comité Ejecutivo, se decidió transmitir las críticas a través de los informes técnicos, como datos que contrastan con los de crecimiento económico que difunde el Gobierno y que al 23 de octubre, reflejaron una caída de la actividad en algunos sectores como el automotriz o el cemento del 18% interanual.
En sus discursos, tanto Milei como el ministro de Economía, Luis Caputo, refutan esos datos con otros datos de crecimiento en otros sectores de la economía. Reconocen que el crecimiento no alcanza todavía a todos los sectores, pero esperan una explosión de actividad para 2025 que podría superar el 5% anual.
Tanto Milei como Caputo y Sturzenegger asistieron al pasado coloquio de IDEA, que reunió en Mar del Plata a los más grandes empresarios del país, y les dijeron que la clave del plan es bajar el déficit, para después cuando haya superávit recién bajar los impuestos a través de una reforma impositiva y laboral integral.
De eso hablaron el jefe de Gabinete, Guillermo Francos y Sturzenegger en las diversas rondas de empresarios y sindicalistas de la CGT que pasaron meses atrás por la Casa Rosada, pero sin avances todavía en una convocatoria concreta para reunir por primera vez a la mesa del Consejo de Mayo, de donde Milei espera que salgan proyectos y reformas "consensuados" con los distintos sectores.
En IDEA, Sturzenegger fue contundente en su mensaje a los empresarios a los que Milei había acusado de ser cómplices del déficit y de pretender vivir de la teta del Estado con medidas proteccionistas y subsidios: "Nunca más nos pidan que bajemos impuestos"
Federico Sturzenegger afirmó que si piden la baja de impuestos al Gobierno "el gasto se mantiene igual y a alguien hay que cobrárselo" y advirtió: "Ustedes nos tienen que pedir que bajemos el gasto."
En ese marco, el Gobierno avanzó desde el desembarco de Sturzenegger en el gabinete como ministro de Desregulación y Transformación del Estado, en la eliminación de regulaciones: esta semana oficializaron la baja de impuestos a las importaciones, para bajar los precios productos electrodomésticos, entre otros sectores, que empezaron por el textil, y que según los industriales argentinos, podría derivar en un cierre masivo de fábricas locales y aumento del desempleo.
También se espera que para diciembre otra ola de despidos de empleados del Estado, para llegar al número que había anunciado Milei para el primer año, unos 70.0000.
