Pese a las protestas y quejas por la normativa que busca desalentar la salida de sus casas de adultos mayores de 70 años, en el gobierno de la Ciudad ratificaron una vez más la medida y sostuvieron que no se busca quitarles “autonomía” a esas personas, sino que el objetivo “es poner al Estado a disposición del adulto mayor”. Además, resaltaron la cantidad de llamadas recibidas en el primer día.
“La medida no intenta quitar autonomía, ya que mantiene la decisión de circular en la persona. Lo que hacemos es poner al Estado a disposición del adulto mayor", señaló el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, en una conferencia de prensa.
Allí mismo, el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, también habló del malestar de muchos ciudadanos y admitió haber recibido “muchos llamados”, tanto de “gente enojada” como de otros que “valoran y agradecen la decisión”. Y en ese sentido, reafirmó que seguirán adelante con la norma.
“Desde el primer día escucharon mis obsesiones en el cuidado de los mayores de 70 años. Los datos lo confirmaron. Hay más circulación en la calle, lo que significa más riesgo de contagio”, afirmó Larreta, quien luego repasó cifras para justificar la medida.
“Antes de las 8 ya había más de 3500 llamados al 147. Cada uno de los mayores que logremos que no salga, y que hayamos solucionando su problema de otra manera, es un logro", afirmó.
Por su parte, Quirós señaló que "la cuarentena nos hizo perder nuestra forma de vivir” y que cada determinación que se toma “afecta a alguien”. Y en ese punto, puso como ejemplo al aislamiento que deben cumplir los repatriados y “las operaciones programadas se han suspendido".
