La creación de las LECODI tiene como fin generar un mecanismo "que afecte a los sujetos que tienen alguna incidencia en la diagramación o ejecución presupuestaria". Esa afección se dará en forma de “castigo económico” en caso de una mala gestión financiera que afecta la confiabilidad crediticia del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. "Es decir, si la gestión es “mala”, el precio de estos títulos bajará, y los funcionarios pasarán a recibir un menor ingreso", explicaron desde el despacho del legislador.
De aprobarse la ley, la medida alcanzará a las máximas autoridades: Jefe y Vicejefe de Gobierno, diputados, secretarios y ministros.
En su cuenta de twitter, Ramiro Marra expresó: “Este proyecto busca que los salarios de funcionarios sean en base a su trabajo y la opinión del pueblo. Es un cambio revolucionario, porque es la forma de que reaccionen sobre que están haciendo las cosas muy mal en la gestión”.
Luego de presentar el proyecto, el diputado concluyó: “En el sector privado cuando uno gasta de más o hace mal las cosas, va a la quiebra. Estamos acostumbrados a que en el sector público todo se haga mal y los principales responsables no sientan la diferencia. Con este proyecto queremos modificar la forma en la que los políticos se comprometen con la gestión, ya que, si hacen mal las cosas, sus bolsillos también se van a ver afectados”.