Entre 2005 y 2015, Centeno registró en ocho cuadernos escolares los detalles de los traslados de bolsos con dinero en efectivo que presuntamente se entregaban como sobornos a funcionarios del gobierno. Los cuadernos se entregaron en el año 2018. Allí tomó cuerpo la investigación judicial por la "causa de los cuadernos", como se la conoció popularmente y en los medios de comunicación.
Los reportes anotados por Centeno, tenían nombres de empresarios, de funcionarios, trayectos, horarios y bolsos que se dejaban en entregas regulares. Así, la instrucción judicial llegó a la conclusión de la delicada situación de la expresidente Cristina Fernández de Kirchner. Se configuró la acusación en su contra como jefa de una organización ilícita para el cobro de coimas, de manera sistemática.
Junto a ella, están procesados y camino al juicio oral, muchos empresarios que también tuvieron un duro revés hace poco tiempo. Pidieron a la justicia pagar una fuerte suma de dinero para "compensar el daño" que causaron con el delito, a cambio de la suspensión del juicio oral. Pero esa posibilidad fue rechazada, como ahora acaba de sucederle a la expresidenta, que cursa prisión domiciliaria (con tobillera incluida), por defraudación al estado.
Bonadio y Stornelli
El juez Bonadio (izquierda) y el fiscal Stornelli (derecha), los responsables de la instrucción de la causa "cuadernos de la coima" por la que CFK llega a otro juicio oral. (foto: Gentileza Misiones online)
Las acciones de Cristina Kirchner para evitar el juicio
En todos estos años, mientras la instrucción del fiscal Carlos Stornelli con el juez Claudio Bonadio avanzaba, la expresidenta presentó varios recursos para intentar que la acción judicial se cayera o se la quitara de esa acusación. Su golpe más fuerte fue tratar de que se declarara nula la prueba, justamente, de los cuadernos de Centeno. Planteó que eran apócrifos, o solo fotocopias de un original falso, o mentiras o errores anotados sin fundamento. Sin embargo, la Justicia desestimó todos estos argumentos.
No solo el propio Oscar Centeno declaró y ratificó la autenticidad de los cuadernos. También una pericia de la gendarmería demostró que los cuadernos son auténticos y la caligrafía corresponde a Centeno. Él lo escribió para registrar estas maniobras ilegales durante años y con detalle. Nada menos que sobornos que pagaban empresarios contratistas del Estado de diversos rubros: energía, transporte, obra pública, entre otros.
Además, empresarios decidieron colaborar con la Justicia y el planteo de pagar para evitar que se sustancie el juicio, aunque no es determinante, le da rigor a la acusación.
Pese a estos datos, Cristina Fernández de Kirchner presentó esos recursos para que el juicio no se lleve a cabo. "No debe hacerse lugar a la excepción de falta de acción ni al sobreseimiento que pide la defensa de Cristina Elisabet Fernández", sostiene el fallo de los jueces Enrique Méndez Signori, Fernando Canero y Germán Castelli, al que accedió Clarín.
La fiscal general, Fabiana León, destacó que el hecho de la exculpación por "asociación ilícita" en la causa "vialidad" (Cristina fue absuelta por ese delito) no implica una cosa juzgada para esta otra acusación. Son hechos diferentes y no episodios de una misma conducta, dice la fiscal.
Por eso, Cristina Fernández perdió este último recurso y el próximo 6 de noviembre, comenzará el juicio en su contra por uno de los casos más importantes de corrupción desde el Estado en la historia del país.