El budín de pan es un postre clásico y reconfortante que aprovecha el pan sobrante para crear una deliciosa obra maestra de sabor. Esta delicia se compone de pan en trozos empapado en una mezcla de leche, huevos, azúcar y especias, que luego se hornea hasta obtener un exterior dorado y un interior suave y cremoso.
Puede servirse caliente o frío, solo o con una generosa porción de crema batida o helado. Su textura suave y su sabor a vainilla y canela lo convierten en una opción perfecta para satisfacer tus antojos de postre.
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
En un bol grande, coloca los trozos de pan y vierte la leche sobre ellos. Deja que el pan se empape en la leche durante unos 10-15 minutos, o hasta que esté bien suave y empapado.
En otro bol, bate los huevos y luego agrega el azúcar, la esencia de vainilla y la canela en polvo (si la estás utilizando). Mezcla todo bien hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Si decides añadir pasas, agrégalas a la mezcla de pan y leche empapada.
Vierte la mezcla de huevo sobre el pan empapado en leche y mezcla todo hasta que esté bien combinado.
Engrasa un molde para horno (preferiblemente rectangular) con mantequilla o aceite.
Vierte la mezcla del budín en el molde preparado.
Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 45-55 minutos, o hasta que el budín esté dorado en la parte superior y firme al tacto.
Una vez que esté listo, retira el budín de pan del horno y déjalo enfriar durante unos minutos antes de cortarlo en porciones.
Sirve el budín de pan caliente o frío, según tu preferencia. Puedes acompañarlo con crema batida, helado o una salsa de caramelo si lo deseas.
¡Disfruta de tu budín de pan casero! Este postre es perfecto para aprovechar el pan sobrante y crear una delicia reconfortante.
