Sin embargo, fue otro testimonio el que causó un impacto significativo en la investigación. Un niño, que también estuvo presente en el último almuerzo de Loan antes de su desaparición, declaró que escuchó a Daniel Ramírez y a Antonio Benítez, otro de los acusados, hablar sobre su intención de “ir a cazar carpinchos” y que Ramírez portaba una escopeta en ese momento.
Esta declaración sorprendió a los fiscales, ya que la mención de una cacería no había surgido previamente en el expediente. A pesar de que Ramírez ha sido vinculado a actividades de caza, según sus propias publicaciones en redes sociales, durante un allanamiento en su domicilio no se encontró ninguna arma.
La jueza Pozzer Penzo se enfrenta ahora a la tarea de decidir el futuro procesal de los acusados. En los próximos días, deberá determinar si dicta prisión preventiva, si los sobresee o si decreta la falta de mérito. Mientras tanto, la comunidad de Goya sigue esperando respuestas sobre lo que realmente sucedió con Loan Danilo Peña.