Una película de Netflix, protagonizada por José Coronado, se convierte en un inesperado fenómeno por su intensidad emocional y el parecido con la serie Adolescencia.
La película de Netflix con José Coronado que arrasa por su parecido con Adolescencia, la serie.
Una película en Netflix no solo ha despertado el interés de los fanáticos del thriller psicológico, sino que también ha sorprendido por su parecido temático y emocional con Adolescencia, la serie del momento en la plataforma. Dirigida por Jesús Monllaó y protagonizada por José Coronado, esta cinta gira en torno a un niño perturbador, un psiquiatra involucrado emocionalmente y un padre ausente y violento.
La historia se inicia con un acontecimiento tan perturbador como revelador: el perro de una familia adinerada aparece muerto en su propia casa. Las sospechas recaen inmediatamente sobre Nico, el hijo adolescente, un joven brillante en ajedrez pero profundamente inquietante en su comportamiento. Su mirada fría y su actitud desafiante lo convierten en un enigma constante para quienes lo rodean.
Quienes ya vieron Adolescencia en Netflix, reconocerán los paralelismos con Hijo de Caín: ambos relatos giran en torno a un crimen que sacude a una familia desde adentro, mientras se examinan las sombras de la paternidad, el peso de la infancia y los límites de la empatía. En ambas producciones, el adolescente en el centro de la historia es ambiguo, impredecible y, en muchos momentos, aterrador.
El personaje de Nico (interpretado por David Solans) se convierte rápidamente en el epicentro del conflicto. Su manera de ver el mundo, dominada por la lógica y el control, lo aleja emocionalmente de sus padres y lo acerca peligrosamente al abismo. El ajedrez no es solo su pasión, sino una metáfora poderosa para comprender su forma de manipular la realidad.
José Coronado da vida a Carlos Albert, el padre del joven Nico. Empresario exitoso, pero emocionalmente torpe, su personaje representa ese perfil tan común de autoridad quebrada: un hombre que lo tiene todo, menos el control sobre su propia familia. Coronado, habitual en producciones intensas como Entrevías o La chica de nieve, entrega una actuación sólida aunque algo contenida. Su personaje se mueve entre la ira, el desprecio y una sensación constante de derrota frente a su hijo.
María Molins, en el papel de Coral, la madre, aporta una dosis de sensibilidad y confusión que complementa la rigidez de Carlos. Su vínculo con Julio, el psiquiatra interpretado por Julio Manrique, añade una capa de complejidad emocional al relato. A medida que la historia avanza, ese triángulo emocional se va tensando hasta explotar.
Con la película Hijo de Caín, Netflix confirma su interés por rescatar y posicionar producciones españolas que no solo entretienen, sino que también invitan a la reflexión. Como ya ocurrió con títulos como La chica de nieve o Los renglones torcidos de Dios, el algoritmo apuesta por historias con dilemas éticos, personajes turbios y atmósferas cargadas de tensión.
Esta película en particular ha encontrado una nueva vida gracias a las recomendaciones de los usuarios y su inesperado paralelismo con Adolescencia. Por el momento, esta historia con José Coronado como protagonista se encuentra disponible en Netflix España, aunque se espera que llegue también a la Argentina en el corto plazo.
