Luz confesó lo que todos sospechaban en Gran Hermano luego de la salida de Juan Pablo. Mirala.
La convivencia dentro de la casa de Gran Hermano siempre genera roces, alianzas, traiciones y confesiones inesperadas. Pero esta vez, la protagonista de la polémica no fue una pelea entre participantes, sino un gesto hacia un integrante muy especial del reality: Jaime, uno de los perros de Juan Pablo.
Tras la salida de Devi el pasado lunes, se generó un clima más distendido entre algunos participantes. En ese marco, Luz —conocida por su fuerte personalidad— hizo una confesión que, aunque muchos ya la intuían, generó una ola de indignación: “Me cae muy mal Jaime”, dijo sin rodeos, refiriéndose a uno de los dos perritos que acompañan a Juan Pablo dentro del reality.
“Con Bartolo tengo buena relación, pero con Jaime… no puedo”, fueron palabras de Luz que no tardaron en encender las alarmas. Lo que parecía una simple opinión personal, se convirtió rápidamente en un tema central en redes sociales, especialmente cuando comenzaron a circular videos donde se observa a la participante apartando a Jaime con el cuerpo o incluso bloqueando su paso cuando estaba junto a Bartolo.
La situación escaló cuando algunos usuarios decidieron presentar denuncias pidiendo que la producción de Gran Hermano intervenga, y en caso de comprobarse maltrato, tome medidas disciplinarias contra Luz.
Jaime es uno de los dos perros que ingresaron a la casa junto a Juan Pablo, uno de los participantes más carismáticos del certamen. De raza pequeña, pelaje claro y actitud juguetona, Jaime rápidamente se ganó el cariño de los espectadores, especialmente por su ternura y su apego emocional a Juan Pablo.
En cambio, Bartolo, más tranquilo y de pelaje oscuro, parece haber conectado mejor con Luz, lo que encendió un debate sobre el trato desigual y lo que muchos consideran una forma de “discriminación animal”.
El reality está bajo la lupa, no solo por el tratamiento del conflicto, sino también por su deber de proteger a todos los seres vivos dentro del programa, sean humanos o animales.
