En Benito Juárez, el temporal golpeó con mayor fuerza. Ráfagas de viento —posiblemente asociadas a la cola de un tornado— arrancaron parte del techo del Hospital Municipal Eva Perón y obligaron a suspender la atención médica. También quedó destruida la cubierta de la pileta climatizada. Bomberos, Defensa Civil y personal municipal trabajaron para mitigar los daños, y las autoridades dispusieron la suspensión de clases en toda la jurisdicción, incluidas las zonas de Estación López, Tedín, El Luchador, Coronel R. Bunge y de la escuela EP Nº 11.
Laprida también fue afectada por la caída de granizo, que causó destrozos en techos, patios y automóviles. En Tandil, las lluvias fueron particularmente intensas, con un registro de 38 milímetros en apenas 16 minutos, lo que equivale a una tasa de precipitación de 123 mm por hora, según La Voz de Tandil. El momento más crítico ocurrió entre las 20.45 y las 21, cuando cinco personas —tres adultos y dos menores— debieron ser evacuadas. No hubo heridos, aunque se reportaron cortes de energía, árboles caídos y unas veinte viviendas afectadas por el ingreso de agua.
En Azul, el acumulado de precipitaciones alcanzó los 65,5 milímetros, acompañado de vientos del sur con ráfagas de hasta 76 km/h, según registros oficiales. También se reportaron árboles y postes caídos, pero sin víctimas. En Coronel Pringles, el escenario fue similar, con abundante lluvia, granizo y calles completamente colapsadas.