El equipo de Miguel Ángel Russo empató en el debut con Benfica y ahora necesita un buen resultado ante Bayern Múnich para seguir con chances. La goleada de las Águilas sobre Auckland complicó el panorama.
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El Mundial de Clubes 2025 avanza a paso firme y Boca no tiene margen para el error. Tras igualar 2 a 2 frente a Benfica en su debut, el conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo enfrenta un panorama más complejo tras la abultada victoria del equipo portugués ante Auckland City. El Grupo C está al rojo vivo, y el Xeneize deberá sumar fuerte en los próximos encuentros si quiere meterse entre los 16 mejores.
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El empate ante Benfica dejó sensaciones encontradas. Boca estuvo cerca de llevarse los tres puntos, pero un gol de Nicolás Otamendi en el cierre frustró el sueño de un arranque ideal. Con ese resultado parcial, todo parecía abierto en la zona. Sin embargo, el 6-0 de los lusos frente al débil Auckland City movió el tablero y obligó a recalcular.
Con dos fechas disputadas, Benfica lidera el grupo con 4 puntos y una diferencia de gol de +6. Le sigue Bayern Múnich, que tiene 3 unidades pero con un partido menos. Boca, por su parte, está tercero con un punto y diferencia neutra. Auckland, ya sin chances, cierra la tabla sin sumar.
El objetivo es claro: terminar entre los dos primeros del grupo para acceder a los octavos de final. Pero los caminos posibles son diversos y, en su mayoría, dependen no solo de lo que haga el equipo argentino, sino también de los resultados ajenos.
1. Si Boca vence a Bayern Múnich
Un triunfo ante el gigante alemán sería el escenario más favorable. Lo dejaría con 4 puntos y lo posicionaría segundo (si Bayern y Benfica luego empatan) o incluso líder, si luego logra una buena diferencia ante Auckland City. En ese caso, ganándole también al equipo neozelandés, no habría necesidad de hacer cuentas.
2. Si Boca empata con Bayern y vence a Auckland
Este escenario lo llevaría a sumar 4 puntos. Para clasificar, necesitará que Benfica pierda contra Bayern. Si eso sucede, Boca y Benfica terminarían con la misma cantidad de puntos, y el segundo boleto se definiría por diferencia de gol. Ahí es donde el 6-0 del equipo portugués ante Auckland marca la vara: Boca debería golear por una diferencia aún mayor.
3. Si Boca pierde con Bayern y vence a Auckland
Es la opción menos conveniente, pero aún lo deja con posibilidades. En este caso, también dependerá de que Benfica no sume ante Bayern y que la diferencia de gol le juegue a favor. Por eso, incluso en la derrota, será vital que el equipo argentino no sufra una goleada: cada tanto puede valer una clasificación.
El duelo de este viernes ante el Bayern Múnich será una final anticipada para Boca. Un empate puede transformarse en insuficiente si no viene acompañado de un resultado favorable en el cruce entre Benfica y el equipo alemán. Y una derrota, aunque no lo elimine, condicionará severamente las chances.
En ese contexto, Russo analiza variantes para reforzar el mediocampo y cuidar los laterales, ante un rival que viene de convertir diez goles en su presentación. El mensaje del entrenador fue claro: "Hay que competir con inteligencia". La clave, además de la estrategia, estará en sostener la concentración durante los 90 minutos.
Si Boca logra clasificarse, deberá cruzarse con un equipo del Grupo D, donde compiten Flamengo, Chelsea, Los Ángeles FC y Espérance Sportive de Tunis. Si termina como segundo, enfrentará al líder de esa zona. En caso de avanzar como puntero, su rival será el escolta.
Más allá de los nombres, el objetivo inmediato es claro: sumar. El margen de error se achica, y Boca deberá dar el golpe para seguir soñando en el Mundial de Clubes.
