“Está mal informado. Ni siquiera fue una reunión del Comité Ejecutivo de AFA”, expresó el dirigente ante sus pares. “La decisión de ese campeonato, que es una atribución solamente del Comité Ejecutivo de AFA, está mal porque fue una reunión de la Liga Profesional, que es un órgano dentro de AFA, pero no es el Comité Ejecutivo”.
Es decir: la reunión donde se tomó la decisión no era el ámbito competente para definir un reconocimiento de esa magnitud.
Qué tipo de reunión fue y por qué River habla de irregularidades
Villarroel remarcó que el encuentro en Puerto Madero estuvo lejos de la formalidad habitual que caracteriza al Comité Ejecutivo. En esas instancias suele haber una orden del día, documentación previa y una estructura deliberativa. Nada de eso ocurrió.
“La formalidad de la reunión no tuvo la rigidez que generalmente tiene el Comité Ejecutivo de AFA, donde hay una orden del día”, detalló. “Fue una reunión informativa de cómo estaba planteado el calendario 2026”, agregó.
Según su relato, el reconocimiento a Rosario Central no formaba parte del temario, ni fue presentado como un punto a votar o discutir.
“Al final de la reunión, sin ponerlo a consideración, se comentó o informó a la mesa que se iba a hacer un reconocimiento a Rosario Central por haber liderado la tabla de puntuación anual”, añadió.
El dirigente, además, fue contundente al explicar el giro que sorprendió a los asistentes: “Después eso se transformó, sin ningún tipo de expresión de voluntad, consentimiento o voto, en lo que fue la entrega de la copa a Central”.
Lo que inicialmente fue presentado como un simple reconocimiento simbólico, terminó derivando en la entrega de un trofeo sin precedentes, generado sin consulta formal y comunicado sin claridad a los 30 clubes de Primera División.
La versión coincide con lo expuesto previamente por Estudiantes, que había denunciado que la entrega de la copa no había sido aprobada por los clubes y que Tapia había actuado sin un procedimiento reglamentario.
Hasta el momento, Estudiantes era la única institución que se había expresado de forma directa. La aparición de River tiene un peso institucional significativo, no solo por su representación en el Comité Ejecutivo sino por el contexto: el club venía de quedar eliminado y celebró una reunión dirigencial donde se trató el episodio.
El Millonario acompañó la postura del Pincha -presidido por Juan Sebastián Verón- y aclaró que la premiación a Rosario Central fue resultado de una resolución unilateral emanada del Comité Ejecutivo de la Liga Profesional encabezado por Chiqui Tapia, pero sin la forma ni las instancias correspondientes.
¿Qué puede pasar ahora con la polémica copa?
Aunque por el momento no se habló de impugnaciones ni pedidos formales, la versión conjunta de River y Estudiantes abre un nuevo capítulo en el conflicto. La falta de votación y la ausencia de aval reglamentario dejan en evidencia inconsistencias que podrían derivar en futuras discusiones dentro de los órganos de AFA.
Por ahora, la pelota vuelve a rodar fuera de la cancha, con dos de los clubes más influyentes del país reclamando transparencia y procedimiento en una decisión que tomó por sorpresa a todo el fútbol argentino.