"Hoy más que nunca es necesario que el mundo libre se alce de forma conjunta contra las amenazas a la libertad", exhortó. Además, celebró la intervención de Donald Trump para que Hamas entregara a los rehenes que permanecían con vida, entre ellos los tres argentinos: Eitan Horn, Ariel y David Cunio. "Por un milagro semejante, no hay más que agradecer a Dios", dijo.
En ese sentido, afirmó: "Mientras la gran mayoría del mundo libre decidió darle la espalda al Estado judío, nosotros le dimos la mano. Mientras la gran mayoría hacía oídos sordos al crecimiento del antisemitismo en sus tierras, nosotros lo denunciamos con más ímpetu. Porque al mal no se le debe responder con indiferencia".
"La consecuencia de borrar la diferencia entre el bien y el mal, de resignar los valores judío-cristianos es que empezamos a perder el rumbo. Empezamos como pueblo a confundir la caridad con la redistribución. Empezamos a hacer del pobre un esclavo del Estado. Empezamos a robarle el fruto de su trabajo al honesto con argumentos grandilocuentes. Esa retórica nos terminó estancando", planteó.
En esa línea, insistió: "Esta verdad tan básica, tan evidente, tiene que ser escondida por los adoradores del Estado presente, ellos necesitan que la gente piense que el Estado es el que crea el crecimiento y el bienestar en lugar de su propio esfuerzo y esto para que después la gente no tenga herramientas ni argumentos para evitar que le saquen todo lo que es suyo y reduzcan a esclavos al político de turno".
"Israel es un ejemplo de todos estos valores que hicieron grande a Occidente", elogió y llamó a "apoyar a Israel" en Argentina.