Sin embargo, en el predio de Ezeiza, el Xeneize no pierde la esperanza. Con un contrato que finaliza a mediados de 2025, confían en que el contexto pueda cambiar, especialmente con la atracción de un Mundial de Clubes en el horizonte, torneo al que Boca está clasificado y que la Roma aún no disputará.
Paredes, por su parte, no cerró la puerta a futuro: “Siempre es lindo jugar un Mundial de Clubes, es una competición espectacular. Pero mucho no puedo decir, tengo que vivir mi carrera día a día”.
Además, su vínculo con figuras clave del club como Fernando Gago y Juan Román Riquelme mantiene viva la posibilidad de un retorno, aunque por ahora deberá esperar. El propio Gago, que compartió cancha con Paredes en noviembre de 2013, fue mencionado por el volante como una influencia positiva, aunque el llamado de Ranieri resultó decisivo.
En el mientras tanto, Boca analiza otras alternativas para reforzar la posición, incluido Leonardo Gil, ante la imposibilidad de contar con el 5 campeón del mundo en el próximo mercado de pases. Por ahora, la llama de la ilusión sigue encendida en Brandsen 805.