Las precipitaciones llevan ya tres semanas continuas y el pronóstico advierte que así seguirá el clima en esa región. La cantidad de afectados ya es de 600.000 personas y las pérdidas llegan a los 3.600 millones de dólares.
Sigue el pronóstico de lluvias y más inundaciones para el sur de Brasil (Foto: gentileza Brasil pra Criancas).
Ya son más de 140 los muertos, hay más de 130 desaparecidos y 85.000 personas en condición de refugiados. Pero en total son por lo menos 600.000 las personas afectadas directamente por las inundaciones que ya llevan tres semanas sin interrupciones en el estado brasileño de Río Grande do Sul.
Para peor, el pronóstico meteorológico parece replicarse cada día: lluvias fuertes, persistentes, peligro de inundaciones y además, baja de la temperatura. Todas esas condiciones constituyen la peor catástrofe climática para el sur de Brasil. Al día de hoy, se calcula que harán falta unos 3.600 millones de dólares para invertir en la "reconstrucción del estado". Eso, sin evaluar, por ejemplo, las perdidas por el arroz, uno de los principales cultivos y que más se exporta y consume también en esa zona de Brasil.
El Instituto Nacional de Meteorología (INMET) volvió a emitir un alerta por nuevas precipitaciones acompañadas por una baja de las temperaturas. Esta vez, el foco de las precipitaciones se dio en dos valles al norte de Porto Alegre: en Caí y Tacuarí. Pero por ser justamente un valle, el agua se acumula y baja como un torrente incontrolable hacia la zona de Porto Alegre.
Luego, vuelca su caudal en el río Gualba, que ya está desbordado, y sigue alimentando a la enorme Laguna de los Patos, que inundó a las ciudades instaladas en su ribera sur.
El río Tacuarí se desbordó e inundó todo el valle. En la ciudad, el agua llega a tapar casi hasta el nombre de las calles en los postes.
Con este alerta, la recomendación es seguir evacuando inmediatamente las zonas de riesgo y, además, se refuerza el pedido que los residentes que han tenido que abandonar sus hogares aún no regresen, ya que el peligro por las inundaciones no ha cesado y falta mucho para eso.
Pero el agua no se detiene allí. Como las corrientes afectan el litoral atlántico, sobre todo, el norte de Uruguay ya comienza a padecer los efectos de la peor inundación en 84 años.
El aeropuerto de Porto Alegre continúa totalmente anegado. Eso impide las tareas de rescate y traslados de emergencia en casos de personas gravemente afectadas por el agua y el frío.
El norte de Uruguay ya tiene graves problemas con el agua que desborda y ocupa sus campos y ciudades. El agua no solo baja por el terreno, sino que se ha desplazado hacia el río Uruguay, lo que trae complicaciones a ambos lados de la costa. La ciudad argentina de Concordia es una de las más afectadas.
En el vecino país, el último informe del Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) reveló que hay 3.034 personas desplazadas a causa de las inundaciones en nueve departamentos del país.
Las localidades más afectadas por el agua son Paysandú, Treinta y Tres, Salto, Durazno, Cerro Largo, Artigas, Tacuarembó, Rocha y Soriano.
Los responsables del servicio de emergencias oriental recomiendan a las personas permanecer en sus ciudades o pueblos, ya que el agua comienza a anegar rutas e impedir el que se las pueda transitar. El fenómeno que baja desde Brasil no hace más que complicar lo que ya era difícil en Uruguay por las lluvias en su territorio de los últimos días.