Un regreso con "72 días de furia"
En una entrevista exclusiva, Trump atribuyó su victoria a una estrategia denominada "72 días de furia", una campaña que, según él, tocó las fibras más sensibles del electorado estadounidense. Además, reiteró su promesa de indultar a gran parte de los condenados por los disturbios del Capitolio del 6 de enero de 2021, asegurando que esto comenzará “en la primera hora” de su próximo mandato.
La revista incluyó a otras figuras relevantes como finalistas para este reconocimiento, entre ellos la vicepresidenta Kamala Harris, el empresario Elon Musk y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.
El impacto en Wall Street y su celebración en la NYSE
Tras el anuncio, Trump fue invitado a tocar la campana de apertura en la Bolsa de Nueva York (NYSE), acompañado por su esposa Melania, sus hijas Ivanka y Tiffany, y el vicepresidente electo JD Vance. Ante una multitud que coreaba “USA”, expresó: "Este honor significa más para mí que el primero".
La jornada bursátil reflejó el optimismo tras su triunfo electoral: el índice S&P 500 subió un 2,5%, el Dow Jones ganó 3,6% y el Nasdaq alcanzó máximos históricos. Trump, que ve en el mercado un termómetro de su éxito, atribuyó estos resultados a su visión de un crecimiento económico sin precedentes.
Una política económica y exterior bajo la lupa
Trump destacó su intención de agilizar proyectos de infraestructura y recortar regulaciones, prometiendo que su administración aprobará obras de más de 1.000 millones de dólares en tiempo récord. Sin embargo, expresó fuertes críticas al uso de misiles estadounidenses por parte de Ucrania en territorio ruso, planteando un posible cambio en la política exterior hacia este conflicto.
Además, durante su discurso en la NYSE, reafirmó sus planes de reducir impuestos corporativos y desregular la economía para atraer inversiones. Sin embargo, sectores empresariales expresaron inquietudes ante posibles aranceles y represalias comerciales.
Un retorno cargado de simbolismo
La figura de Trump, tanto en las portadas como en los escenarios de Nueva York, subraya su capacidad de canalizar preocupaciones económicas y culturales, transformándolas en un proyecto político que moviliza masas. Desde su mitin en el Madison Square Garden hasta su discurso en Wall Street, el empresario convertido en político demuestra su habilidad para dominar el centro de atención, estableciendo la narrativa de su próximo mandato.
TIME reconoció esta habilidad como un factor clave para moldear el futuro político de Estados Unidos, consolidando a Trump como una figura polarizante pero indiscutiblemente influyente.