Las encuestas y los análisis dicen que la vicepresidente se desenvolvió mejor que el republicano y ganó el debate presidencial en Filadelfia. Donald Trump protestó airadamente sobre una acción tendenciosa para perjudicarlo frente a su rival.
Donald Trump dice que la armaron un a trampa en el debate con Kamala Harris (Foto: Gentileza NYT)
"Fue una discusión de 3 contra 1", dijo Donald Trump tras el debate de la noche del miércoles con Kamala Harris. El candidato republicano dijo que entre los demócratas y la cadena ABC - que transmitió y moderó el debate - lo engañaron: "Me metieron en una trampa", dijo Trump.
En su intento por regresar a la Casa Blanca, dio un paso muy importante cuando ridiculizó a Joe Biden en el primer debate. Pero esta vez, tuvo enfrente a una ágil y agresiva Kamala Harris, quien tomó la posta de la candidatura demócrata.
Para el magnate norteamericano, los temas elegidos y la acción de los moderadores, dos periodistas de ABC, estuvieron totalmente direccionados para favorecer a la Vicepresidenta y, sobre todo, desacreditarlo en cada una de sus intervenciones.
Poco después de terminado el debate, el expresidente Trump comenzó a expresar su fastidio. Tal vez por propia convicción o por los comentarios de sus asesores. El enojo del candidato republicano no era con su desempeño discutiendo con Kamala Harris sino que contra la estructura que tuvo el debate.
Para Trump se trató de una trampa montada entre los demócratas y la cadena ABC. Esta estación de televisión organizó este debate y puso a los periodistas David Muir y Lindsay Davis como moderadores.
Donald Trump se vio como ganador y dijo que había realizado "el mejor de todos sus debates desde 2016". Pero los medios que analizaron sus dichos, verificaron si dio datos correctos y compararon el lenguaje gestual y corporal sacaron otra conclusión: Kamala Harris lo derrotó así como él derrotó en el debate anterior a Joe Biden.
Al revisar lo que pasó, Trump comenzó a cambiar de opinión, pero no sobre su desempeño, sino de los demás actores. Habló de una trampa montada por los demócratas, la Casa Blanca y el medio ABC que organizó y transmitió el debate. En ese punto, el papel de los periodistas no fue casual. Volcaron la discusión para que la opinión pública viera mucho mejor a Kamala Harris.
Trump y sus colaboradores apuntaron que David Muir y Lindsay Davis (los periodistas de ABC News) tomaron partido, como un árbitro que "inclina la cancha". Y marcaron momentos puntuales:
La cadena FOX - impulsora del candidato republicano - tomó la delantera en marcar esa relación desfavorable "3 a 1" contra Trump ( por los dos periodistas y Kamala Harris. Otro medio que se sumó a esa crítica fue el sensacionalista "New York Post". Hixo un juego de palabras con "Ambush" que en inglés significa "emboscada" (trampa) y Kamala ( el nombre de la candidata demócrata.
El resultado de la simbiosis fue "Kambush", una suerte de emboscada o trampa planeada por Kamala. Para que no queden dudas de la disparidad de fuerzas, al pie de la tapa colocaron un a foto de los periodistas de ABC con este título: "Trump sacudido cuando los presentadores de ABC se confabularon contra él durante el debate".
Al otro lado del Atlántico, otro medio sensacionalista agregó más elementos para las suspicacias. Analizaron durante los más de 90 minutos a la vicepresidente. Les llamó la atención los aros que llevó y se animaron a una teoría conspirativa par sumar a la de la parcialidad de ABC. En los aros, Kamala Harris tenía disimulados unos auriculares por donde la ayudaban con datos delos temas que se iban debatiendo o las replicas a Donald Trump.
El Daily Mail publicó un artículo con este título: "La conspiración hace estragos entre los partidarios de Trump tras el debate presidencial mientras los espectadores cuestionan los pendientes de Kamala Harris".
Sobre este aditamento para espionaje apunta que los "trumpistas" creen ver en los aros de perlas doradas años, un dispositivo camuflado que tiene micrófonos ocultos. Por supuesto, los aros "espía" tienen los adelantos de la tecnología. Conectados vía "bluetooth", Kamala podía recibir datos precisos en cada tramo del debate.
En realidad, los aros son de Tiffany y los usa desde hace años, pero ante un mal desempeño de Trump en el debate, cualquier cosa sirve para desviar la atención publica. Tanto, que una cuenta X llamada The Maverick Approach, que afirma ser una fuente de "noticias alternativas" y señala que una compañía llamada NOVA (de Alemania) ya lanzó al mercado esos aparatitos.
"Nada es lo que parece, escribió por "X". La frase también puede aplicarse a quien llegó pensando que iba a derrotar sin atenuantes a Kamala Harris.