No será necesario el aislamiento de todos los grupos en los que trabaja un docente que da positivo.
De cara al próximo comienzo de clases pautado para el 7 de marzo, las autoridades educativas y el Ministerio de Salud Pública de Uruguay llegaron a un acuerdo y actualizaron los protocolos sanitarios relacionados con el coronavirus en las aulas. En tanto, decidieron que los estudiantes y docentes asintomáticos no tendrán que aislarse ni hisoparse cuando se detecta un caso positivo de covid-19 en su grupo. La excepción estará en los casos en que se confirme un brote.
La normativa anterior, vigente hasta el día de ayer, exigía que, con solo un infectado detectado, debía indicarse una cuarentena obligatoria y el testeo masivo apara todo el curso. A partir de ahora, toda la clase permanecerá en cuarentena solo cuando se detecten al menos dos contagios en el mismo grupo y entre los cuales haya un nexo epidemiológico claro.
En caso contrario (cuando no existe un brote), solo se aislarán quienes presenten síntomas, al igual que aquel que dio positivo. No importa si es docente o alumno, ni qué cantidad de dosis de la vacuna contra el covid-19 haya recibido.
“Supongamos que en una clase hay un niño que da positivo. Hasta ese momento, los compañeritos y docentes asintomáticos pueden seguir yendo a clases presenciales. Si al día siguiente aparece otro caso positivo en ese mismo grupo, y todo hace pensar que su único contacto cercano era el niño que había dado positivo el día anterior, ahí se configura un brote y se aísla a toda la clase. Se indica el test de antígenos de inmediato para todos, y aquellos que son negativos tienen que volverse a hisopar al quinto día”, explicó al diario El País la coordinadora de Servicios Médicos de ANEP, Fabiana Carbajal.
Con la nueva reglamentación, además, no será necesario el aislamiento de todos los grupos en los que trabaja un docente que da positivo. “Tampoco será necesario que se aíslen a todos los grupos cuando el hermanito de un estudiante da positivo”, resaltó Silva.
