Luego, habló Blas Cinalli. “Quiero pedir disculpas a todas las personas afectadas, es algo que duele muchísimo hasta el día de hoy. No hubo ningún plan ni nada de lo que se dice”, expresó a su turno.
También se pronunció Matías Benicelli. “Quiero pedir perdón a la familia de Fernando, nunca quise que esto pasara, nunca tuve ningún plan ni intención de matar a nadie. Todos los días lo pienso y estoy arrepentido de lo que pasó. Ojalá se pudiera volver el tiempo atrás, pero ya no se puede. Nunca quise matar a nadie”, aseguró.
A su turno, Ciro Pertossi sostuvo: “Estoy muy arrepentido. Por favor, (quería) pedirle perdón a la familia por haber estado en una pelea donde falleció un chico de nuestra edad. Nunca voy a querer matar (sic) a nadie. Es algo que a mí me afecta mucho. Se murió alguien de nuestra edad. Es muy feo y muy feo lo que nos acusan”.
Máximo Thomsen, entre lágrimas, también sostuvo: "Quería pedir disculpas a la familia y a las personas afectadas. Jamás pensé que algo así podría pasar. Me lastima porque murió un chico de nuestra edad. Jamás tuvimos intención de algo así. Quiero pedir disculpas, sé que a veces las disculpas no alcanzan. Ojalá pudiésemos volver el tiempo atrás y revertir todo esto, pero no podemos y no nos queda otra que pedir disculpas".
Por su cuenta, Enzo Comelli agregó: "Quiero dar mis disculpas a la familia de Fernando. También a mi familia y a las personas afectadas por este hecho aberrante en el que falleció una persona de nuestra edad, que al igual que nosotros tenía toda la vida por delante. Yo sinceramente quiero pedir disculpas a todos los involucrados, que no solo fueron nuestras familias y la familia de Fernando, sino cada una de las personas que dieron testimonio, pasaron este calvario y se sentaron ahí (por los testigos)".
El último en hablar fue Luciano Pertossi. "Quiero pedir disculpas a la familia Báez Sosa y a cualquier persona que haya sido afectada con esto. Nunca quise participar de una pelea donde fallezca una persona (sic). Pido mil disculpas por todo lo malo y siento que lo que ustedes digan o decidan (por el tribunal) va a ser lo correcto. Le pido a Dios que sea algo bueno para todos".
Minutos antes, el abogado defensor desarrolló los fundamentos de su alegato y pidió que sus defendidos sean condenados por el delito de "homicidio en riña", que prevé una pena máxima de seis años de prisión, o que, en su defecto, se los declare culpables por "homicidio simple con dolo eventual" y "se distribuyan las participaciones que el tribunal entienda" de cada uno, o por el delito de "homicidio preterintencional".