El presidente, Alberto Fernández, saludó este domingo a la comunidad judía por el Año Nuevo, festividad conocida como el Rosh Hashaná, y le deseó sus "mejores deseos".
El presidente, Alberto Fernández, saludó este domingo a la comunidad judía por el Año Nuevo, festividad conocida como el Rosh Hashaná, y le deseó sus "mejores deseos".
"Con la aparición de la primera estrella, este 25 de septiembre el pueblo judío comienza la celebración de Rosh Hashaná", dijo Fernández en su cuenta de Twitter.
Y añadió: "Mis mejores deseos para toda la comunidad judía argentina en este año nuevo, el 5783. ¡Shaná Tová Umetuká!", que es un augurio de "año bueno y dulce".
Fernández añadió a sus palabras una imagen con manzanas y miel, alimentos que son tradición en esta celebración de la comunidad judía.
A partir de esta celebración, la comunidad judía abre un período de reflexión y arrepentimiento sobre los pecados del año que concluye el décimo día con la celebración de Iom Kipur o Día del Perdón.
El domingo 25 de septiembre la comunidad judía comenzará a celebrar Rosh Hashaná, la llegada de un nuevo año. Luego de dos años de pandemia, en los que las reuniones familiares estuvieron restringidas o no podían realizarse, la llegada del año 5783 volverá a generar nuevamente encuentros presenciales, en los que se compartirá la tradición y se pedirán bendiciones para el tiempo que comienza.
Como es tradición, las familias se reúnen alrededor de la mesa. “En el Seder se comparten ciertos alimentos como símbolos de deseos para el año entrante”, explica Nelson Wejkin, el chef que tiene a su cargo los cursos de cocina judía en AMIA y comparte sus recetas en el programa de la institución que emite la TV Pública cada domingo.
“Entre los platos tradicionales se encuentra la Jalá Agulá (pan redondo), que simboliza el ciclo que representa el comienzo de un año nuevo, y a su vez, el concepto cíclico del tiempo y la vida”, detalla Wejkin, chef especializado en cocina étnica.
“También es un clásico de la cocina judía para esta festividad el pescado, que se prepara como Guefilte Fish. Se presenta como un símbolo y un recordatorio para que estemos a la cabeza y no en la cola, y que podamos aprovechar al máximo el potencial que nos brinda un nuevo año”, señala el chef.