Sin la presencia de Javier Milei, Guillermo Francos y Federico Sturzenegger reciben a representantes de los gobernadores, diputados, senadores, empresarios y gremios para la primera reunión del Consejo de Mayo.
El gobierno convoca a la primera reunión del Consejo de Mayo, tras un año de la firma del pacto con gobernadores, gremios, empresarios y legisladores para debatir reformas laboral, previsional y tributaria. Tensión con los gobernadores por la coparticipación. Foto: Archivo Casa Rosada.
El gobierno convocó para este martes en Casa Rosada a los representantes de los gobernadores, diputados, senadores, empresarios y gremios para la primera reunión del Consejo de Mayo, un organismo creado por decreto para debatir proyectos de reformas económicas, políticas y sociales, planteadas el año pasado por Javier Milei en el denominado Pacto de Mayo.
Está convocatoria se produce en momentos en que el gobierno intenta retomar la iniciativa política, tras un hermético silencio luego de que la detención de la expresidenta Cristina Kirchner acaparara el escenario político.
Con el objetivo de dejar atrás la confrontación con la expresidenta, Milei ordenó a su entorno acelerar la agenda de reformas estructurales, antes de que el próximo 8 de julio, se termine el plazo de la delegación de facultades extraordinarias aprobado el año pasado por el Congreso al Ejecutivo en el marco de la Ley Bases.
Con el objetivo de buscar apoyo político y empezar a debatir proyectos de ley para avanzar en las reformas de fondo en materia laboral, previsional, tributaria y coparticipación federal, serán las prioridades, dijeron fuentes del gobierno a A24.com.
La cumbre no estará presidida por Milei, sino por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos y el ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger, como los representantes del Poder Ejecutivo Nacional.
Fuentes de la Casa Rosada admitieron este lunes a a24.com, que la reactivación del Consejo de Mayo se da en un momento estratégico, cuando el gobierno necesita avanzar en nuevos acuerdos con la oposición dialoguista, para que aprueben en el Congreso la reforma a la ley penal tributaria a través del proyecto de “Principio de Inocencia Fiscal”, que busca enviar un mensaje de confianza a los argentinos para que blanqueen “los dólares del colchón”.
El gobierno espera que ese proyecto para “blindar los dólares” en negro, empiece su tratamiento en comisión de Diputados esta misma semana, en medio de un creciente clima de protestas sociales y gremiales en contra del ajuste.
El Consejo de Mayo es un organismo creado por decreto de Milei el año pasado para generar un espacio de debate de propuestas entre el Poder Ejecutivo Nacional y los representantes de distintos sectores empresarios, gremiales y políticos, como son las provincias y ambas cámaras del Congreso.
El objetivo es que desde allí surjan proyectos de ley de reformas planteadas en el famoso Pacto de Mayo.
Está presidido por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, mientras que el ministro de Desregulación Federico Sturzenegger es el representante del Ejecutivo.
Los gobernadores están representados por el mendocino Alfredo Cornejo, el Senado por Carolina Losada y Diputados por Cristian Ritondo. El secretario del gremio de la Construcción, Gerardo Martínez (UOCRA) irá por los sindicatos y Martín Rappallini (UIA) por el sector empresarial.
La reunión de este martes definirá los lineamientos para transformar los compromisos del Pacto en proyectos legislativos, aunque el Gobierno reconoce que las reformas laboral, tributaria y previsional no prosperarán antes de las elecciones de octubre.
Este organismo, creado tras el Pacto de Mayo de julio de 2024, debutará mañana en la Casa Rosada, con la reforma laboral y la coparticipación federal como prioridades.
Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, emergerá como figura clave, aunque su rol exacto se redefinirá ante el vencimiento de las facultades delegadas del Ejecutivo el próximo 8 de julio.
Su agresiva política de ajuste (y su interna con el ministro Luis Caputo), que incluye la eliminación de organismos descentralizados como la Marina Mercante y una nueva ola de decretos para reestructurar áreas como el INTA, genera tensiones internas y externas, complicando las aspiraciones de Milei de negociar con actores clave en el Consejo.
La decisión de Milei de activar el Consejo de Mayo busca contrarrestar el impacto político de la detención de Cristina Kirchner por un lado, y por otro, buscar apoyo político frente a las crecientes movilizaciones gremiales, que esta semana reunirán a más de 70 sindicatos en una marcha al Ministerio de Desregulación por la eliminación de 48.000 empleos públicos.
Este lunes los gobernadores se juntaron en una cumbre en el CFI y tras una hora y media de conversaciones con el Gobierno, terminaron planteando su propio proyecto de ley para garantizar los reclamos de transferencias de coparticipación.
Por su parte, la CGT reunía este lunes a la tarde a la mesa chica en la sede del gremio de Sanidad, para darle a Martínez la postura que tomará la central sindical a los proyectos de reforma laboral que plantea el Gobierno de Milei.
Casualmente, un día antes de esta cumbre, el Gobierno nacional oficializó, con un decreto de necesidad y urgencia, la reforma al sistema de indemnización por despidos.
Durante la última reunión de Gabinete, la semana pasada, el presidente Milei ordenó a todos los ministros acelerar el ajuste de gastos, para cumplir las metas del FMI (superávit fiscal del 1,3%), rechazar incrementos salariales para funcionarios y acelerar los puntos del Pacto de Mayo, que incluyen equilibrio fiscal, reducción del gasto público al 25% del PBI, reforma tributaria y modernización laboral.
