Marano aseguró que su defendido explicó cada uno de los chats, enviados a 7 destinatarios distintos, en los que se refería a se atribuía participación en la planificación del ataque y refirió que, tal como lo hizo la primera vez, se excusó en que “ese era su humor”.
Durante la indagatoria, Carrizo también sostuvo que su hipótesis respecto del atentado a Cristina Kirchner fue que Fernando Sabag Montiel, detenido y procesado como el autor material del ataque, lo hizo porque quería impresionar a Brenda Uliarte, sindicada como coautora del hecho.
"Carrizo dice en siete chats básicamente lo mismo, casi que corta y pega el mismo chiste, la misma chanza", aseguró el letrado y agregó: "Hoy pudo explicar con los chats delante por qué resulta a todas luces que no se trataba de una frase cierta, de hecho circunscribió que no era la primera vez que hacía bromas de estas características".
La ampliación de la indagatoria se dispuso a partir de que se hallaron en el celular de Carrizo nuevos mensajes de texto, que no habían sido detectados cuando se lo indagó por primera vez en septiembre pasados: esos mensajes fueron recopilados en un trabajo llevado a cabo por la Datip (Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal), que depende de la Procuración General de la Nación.
Los mensajes que se encontraron en el celular de Nicolás Carrizo:
- "Recordá esta fecha".
- "Esta hdp (sic) ya está muerta".
- "Para que el gobierno sepa con quienes se están metiendo".
- "Recién intentamos matar a Cristina".
- "Mi empleado, le quiso disparar”.
- "Va a ir preso".
- “El arma es mía amigo".
- "Estamos con el grupo. Todos juntos".