Pero en su discurso, Alberto Fernández atribuyó la organización del evento a la primera dama: "El 14 de julio día del cumpleaños de mi querida Fabiola, Fabiola convocó a un brindis con sus amigos, que no debió haberse hecho. Lamento que haya ocurrido, claramente lo lamento".
"Mirado en retrospectiva, debí haber tenido más cuidados, que evidentemente no los tuve. Hoy Santiago Cafiero a la mañana explicó esto que pasó, que todos lo supieron porque no ocultamos nada, están los listados" de todos los que ingresaron a Olivos, dijo y prometió que "esto no va a volver a ocurrir".
Desde la Casa Rosada la estrategia es "mirar el futuro", seguir con la campaña y tratar de que el affaire negado primero y reconocido hoy por el Presidente, quede como una anécdota en el tiempo e influya lo menos posible en el resultado electoral.
Eso mostraron en los discursos en el acto en Olavarría tanto Alberto Fernández, como quienes lo precedieron: el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa (tercera pata del Frente de Todos) y el gobernador cristinista, Axel Kicillof, quien en un mensaje subliminal, dijo que "somos conscientes que no estamos en condiciones de festejar por la pandemia" pero apostó a pedir apoyo de los bonaerenses de cara a las próximas elecciones.
En sus discursos, Massa, Kicillof y Alberto -eran escuchados por los principales ministros desde sillas ubicadas al aire libre en Olavarría- apostaron a duras críticas a la gestión de Mauricio Macri y de Juntos por el Cambio y a polarizar al extremo las próximas elecciones, invitando a la gente a "decidir entre uno y otro modelo".
Tras el discurso del presidente que dijo "dar la cara y hacerse cargo de los errores", la estrategia del oficialismo, más allá de las internas, fue que "todos salgan a bancar a Alberto Fernández". Nadie se va a salir de ese libreto. Aunque por lo bajo van a seguir los pases de facturas.
Así el Presidente terminó su descargo ante las polémicas fotos de cumpleaños de Fabiola Yañez en Olivos, en medio de encendidos aplausos de funcionarios nacionales y bonaerenses entre los que se encontraban dos de las máximas figuras de La Cámpora: Wado De Pedro y Andrés Larroque. No estuvo Máximo Kirchner, autor del proyecto de ley que dio origen al acto en Olavarría.
El Gobierno desestima una crisis institucional
Fuentes cercanas a Alberto Fernández consultadas por A24.com le bajaban este viernes, el tono a la posibilidad de que prospere el pedido de juicio político presentado por la oposición de Juntos por el Cambio en el Congreso.
Un alto funcionario de la Casa Rosada dijo a A24.com que "los de la oposición no tienen autoridad moral" para denunciar al presidente, que "presionado" gobernando en medio de la pandemia "pudo haber cometido un error".
Pero dicen en el entorno del Presidente: "los de la oposición deberían someterse también a juicio político y a una investigación judicial por haber impulsado las marchas anti-cuarentena que provocaron miles de contagios y el odio de la gente por las vacunas".
Con ese discurso, salieron varios funcionarios en "on" y en "off the récord" mientras esperaban este viernes el pedido de perdón público del presidente Alberto Fernández en un acto en Olavarría y el reconocimiento por primera vez de la polémica foto del cumpleaños de la primera dama, que días antes él mismo había negado.
Fernández era esperado en Olavarría por una protesta de vecinos indignados, con la foto de la fiesta en cuestión.
La interna con La Cámpora y el cristinismo puro
Cerca de la vicepresidenta Cristina Kirchner y del líder de La Cámpora, Máximo Kirchner mantenían un estricto hermetismo pero hicieron visible el malestar de ese sector del oficialismo, a través de declaraciones del senador ultra k, Oscar Parrilli.
En declaraciones a Radio Con Vos, el senador Parrilli señaló que "ya dio las explicaciones el Jefe de Gabinete (Santiago Cafiero) al reconocer que fue un error, lo consideró así".
Parrilli -uno de los senadores más cercanos a Cristina Kirchner- se plegó al discurso de la Casa Rosada para responder a las críticas y al pedido de juicio político contra el Presidente, al señalar que "la oposición no tiene autoridad moral", aunque aprovechó la oportunidad para mandar un mensaje crítico del cristinismo al entorno del presidente Alberto Fernández.
" Hay que hacer un llamado de atención a quienes están al lado del presidente para que no cometa este tipo de errores. No me parece que esto tenga efectos sobre el Gobierno. Este fue un error y no pasa de esto", lanzó Parrilli.
Los cruces entre el albertismo con Cristina y La Cámpora afloraron el mismo jueves, día que se conoció la polémica foto de la fiesta de cumpleaños en Olivos, con una serie de mensajes en las redes sociales en que la organización dirigida por Máximo Kirchner cuestionaba al PJ que presidente Alberto Fernández, por haber posteado una foto de festejo electoral sin Cristina tras el triunfo en las PASO de 2019.
Y Cristina lo hizo notar y envió un mensaje crítico, al armar un acto paralelo en Lomas de Zamora, mientras el presidente encabezaba otro a la misma hora en Entre Ríos.