Atentado contra Cristina: el Gobierno desmiente que Alberto Fernández analice impulsar una ley contra el odio (Foto: Telam).
La Casa Rosada salió a desmentir este miércoles al senador kirchnerista José Mayans y aclaró que el presidente Alberto Fernández "no dijo nada sobre una ley" para impulsar una norma que califique como un delito penal a las expresiones públicas que se difundan en medios de comunicación en el marco de lo que el Gobierno denunció como "discursos del odio".
El Presidente "no pidió que se estudie nada, no va a haber ley contra el odio", aclararon a A24.com fuentes muy cercanas al jefe de Estado consultadas. Sin embargo, Mayans aseguró este miércoles que en la reunión que mantuvieron ayer en la Casa Rosada, el Presidente le dijo que analizará con constitucionalistas la posibilidad de impulsar un proyecto de ley contra el odio.
En tanto, altas fuentes del kirchnerismo en el Senado insistieron ante A24.com con la idea contraria: "Había una idea, se iba a presentar un proyecto en Diputados, pero luego de las declaraciones de Alberto, desconocemos si prosperó".
Las declaraciones de Mayans sorprendieron luego de que la misma portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, saliera el martes a desmentir que el Presidente haya dialogado con el senador sobre ese tema. Una desmentida similar salieron a ofrecer desde Diputados la titular de la Cámara, Cecilia Moreau, y el jefe del bloque de diputados del FdT, Germán Martínez. "No hablamos con el Presidente ni se impulsa ninguna ley del odio" dijeron al unísono.
Pero en diálogo con Radio Con Vos, Mayans trazó otro panorama: "Me dijo que iba a trabajar en una consulta y que de ninguna manera quiere coartar la libertad de prensa ni una Ley Mordaza, pero está trabajando y vamos a trabajar el tema para ver si podemos tener una democracia que cuide a las personas y estos grupos que son violentos que rindan cuentan a la sociedad", afirmó Mayans.
"Va a haber una consulta con constitucionalistas porque no se olviden de que la figura del desacato fue lo primero que sacó Cristina Fernández de Kirchner. Después está el tema constitucional y lo que tiene que ver con el periodismo y el derecho que tiene la actividad, la preservación de la fuente, entre otras cosas. Me dijo eso y estamos hablando para cuidar a las personas y evitar que estos grupos violentos estén trabajando abiertamente en las redes", señaló el senador.
Lo llamativo del caso es que, según lo informado oficialmente, esa reunión había servido para acordar temas legislativos que pedirá el Poder Ejecutivo, y también para una invitación de Alberto Fernández a la primera reunión desde que llegó a la presidencia con todo el bloque de senadores del Frente de Todos.
Aunque ahora nadie en el oficialista Frente de Todos se hace cargo oficialmente, la polémica surgió el lunes, luego de que la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI), Victoria Donda, convocó al Consejo Federal de Políticas Públicas Antidiscriminatorias para iniciar la redacción de un proyecto de ley contra esos mensajes.
La primera reunión estaba prevista para este jueves y fueron invitados representantes de la Defensoría del Público de la Nación, el Instituto contra la discriminación de Ciudad de Buenos Aires y funcionarios cuyas tareas se encuentren relacionadas a la materia. "El objetivo será proponer una serie de herramientas para actuar frente a estos discursos" señaló Donda.
"Ante el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el marco de una violencia política creciente que se sustenta en discursos de odio, urge ampliar el debate democrático y con carácter federal de una iniciativa parlamentaria que busque acabar con las expresiones y acciones antidemocráticas", sostuvo el comunicado del INADI.
Posteriormente, varios funcionarios salieron a apoyar el debate de la norma, entre los que se destacaron la portavoz Cerruti; el jefe de la AFI, Agustín Rossi; el gobernador Axel Kicillof; el asesor presidencial, Alejandro Grimnson; y el exjuez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni.
Sin embargo, ante el revuelo que generó en los medios de comunicación y en la oposición, desde el oficialismo salieron a bajarle el tono a la iniciativa.
