Se estrena la cuarta temporada del mejor thriller de espías protagonizado por Gary Oldman. La serie que es un éxito en el catálogo de Apple TV.
Gary Oldman y su equipo de perdedores vuelven en la temporada 4 de "Slow Horses".
La cuarta temporada de “Slow Horses” ha llegado a Apple TV sin mucho alboroto, pero con una calidad que sigue siendo indiscutible. Basada en la exitosa serie de libros del británico Mick Herron, esta producción vuelve a mostrar a los “caballos lentos” luchando por redimirse dentro del sombrío mundo del Servicio de Inteligencia Británico, el MI5.
Los agentes relegados a la sombría Slough House han cometido errores graves o problemas personales que los han apartado de las misiones importantes, pero no se rinden. En esta nueva entrega, vuelven a intentar demostrar que aún tienen lo necesario para regresar a la cima.
El nombre de la serie, Slow Horses, es un juego de palabras con Slough House, el edificio que alberga a los agentes degradados del MI5. En este lúgubre lugar acaban aquellos que, por una razón u otra, han sido apartados de las operaciones de campo. Los errores van desde olvidar información ultrasecreta en el transporte público hasta fallar estrepitosamente en misiones críticas, o lidiar con adicciones que interfieren con su trabajo.
A pesar de que su trabajo burocrático es monótono y repetitivo, estos agentes caídos en desgracia aún sueñan con hacer algo lo suficientemente heroico como para recuperar su prestigio y volver a la acción.
A lo largo de las temporadas, hemos visto a este grupo de desadaptados pelear contra la desesperanza y la marginación. Aunque sus vidas profesionales parecen condenadas a la oscuridad de Slough House, nunca dejan de buscar esa oportunidad para redimirse.
El protagonista principal de la serie es Jackson Lamb, interpretado por el formidable Gary Oldman. Su personaje es uno de los más memorables de la televisión reciente. Lamb es una figura sumamente compleja: desaliñado, obeso, borracho y grosero, pero también el más brillante de todos los agentes. A pesar de su apariencia descuidada, Lamb posee una aguda inteligencia y una profunda comprensión de los intrincados juegos de poder dentro del Servicio de Inteligencia.
Lamb lidera un grupo de perdedores que, como dice la canción de apertura compuesta e interpretada por Mick Jagger, son "borrachos e inadaptados". Sin embargo, bajo su aparente inutilidad, aún conservan un conocimiento invaluable y habilidades que, aunque oxidadas, podrían ser decisivas. La cuarta temporada profundiza aún más en los conflictos de estos personajes, manteniendo el equilibrio entre el drama y el humor negro que caracteriza la serie.
La cuarta temporada de Slow Horses comienza con un nuevo misterio que afecta directamente al MI5. Un atentado suicida en un popular centro comercial de Londres pone al Servicio de Inteligencia bajo la lupa pública, generando sospechas sobre su capacidad para proteger al país. Sin embargo, este ataque no es el único evento preocupante. También se produce un asesinato que involucra a uno de los miembros de Slough House, lo que complica aún más las cosas para el equipo de Jackson Lamb.
Con la amenaza de un enemigo desconocido, los "caballos lentos" deben una vez más probar que son capaces de enfrentar crisis mayores a las que sus superiores les asignan. La tensión crece en cada episodio, mientras los personajes se ven forzados a utilizar sus habilidades olvidadas para resolver un caso que podría tener repercusiones enormes para el MI5 y para sus propias carreras.
A pesar de su calidad innegable y las excelentes actuaciones de su elenco, Slow Horses ha sido una serie que ha pasado en gran medida desapercibida para el gran público. Aún así, los fans de los thrillers de espías y aquellos que disfrutan de un buen drama de personajes la han convertido en una serie de culto. Gary Oldman, en particular, ha sido elogiado por su interpretación de Jackson Lamb, logrando capturar tanto la brutalidad como la brillantez del personaje.
La crítica ha resaltado la capacidad de la serie para mostrar el lado menos glamuroso de los servicios de inteligencia, alejándose de los héroes infalibles y centrándose en los perdedores que luchan por no ser olvidados. La mezcla de humor negro, tensión y complejidad emocional la ha convertido en una de las producciones más originales dentro del género de espionaje.
Con la cuarta temporada, Slow Horses sigue manteniendo su enfoque en los personajes imperfectos, ofreciendo tramas inteligentes y bien construidas. Para aquellos que buscan algo más que las típicas historias de espías, esta serie es una joya escondida en el catálogo de Apple TV.
