Franco Colapinto retornó a la Fórmula 1 con Alpine en el GP de Imola, pero en su primera práctica fue increpado con un gesto obsceno por Yuki Tsunoda tras un cruce involuntario en pista.
El regreso de Franco Colapinto a la Fórmula 1 con el equipo Alpine no pasó desapercibido. En su primer entrenamiento previo al Gran Premio de Emilia-Romaña 2025, disputado en el clásico circuito de Imola, el joven piloto argentino protagonizó un momento incómodo con Yuki Tsunoda, actual corredor de Red Bull Racing.
Durante la primera práctica libre (FP1), Colapinto se preparaba para ingresar a boxes cuando, de manera involuntaria, quedó en la trayectoria del piloto japonés, quien se vio momentáneamente obstaculizado. La situación no tuvo mayores consecuencias técnicas, pero la reacción de Tsunoda fue llamativa: sin ocultar su molestia, levantó el dedo del medio en señal de desaprobación, gesto que fue captado por las cámaras y generó revuelo en redes.
Aunque el movimiento del argentino no tuvo intención de interferir, el cruce refleja el clima competitivo que se vive en la Máxima, más aún cuando el piloto de Pilar vuelve a la categoría con altas expectativas tras reemplazar al australiano Jack Doohan, relegado por malos resultados.
El retorno de Colapinto a la F1 se da en un escenario especial: el Autódromo Enzo e Dino Ferrari, donde supo ganar en F3 y F2, y que este fin de semana le ofrece la oportunidad de demostrar su evolución al mando del monoplaza 2025 de Alpine.
Hoy, viernes 16 de mayo, a las 12:00 (hora argentina): Segunda práctica libre (FP2).
Sábado 17:
7:30: Tercera práctica libre (FP3).
11:00: Clasificación.
Domingo 18, 10:00: Carrera del GP de Imola (transmisión en vivo por Disney+ y F1 TV; Fox Sports en diferido).
El incidente con Colapinto se da en un momento clave para Yuki Tsunoda, quien recientemente fue ascendido al equipo principal de Red Bull Racing. A sus 24 años, y con 93 carreras en la F1, el japonés vive su primera temporada como coequipero del cuatro veces campeón Max Verstappen. El pasado abril debutó oficialmente con Red Bull en su país, Japón, y busca afianzarse como piloto titular tras varios años de progresión.
Mientras tanto, Colapinto continúa escribiendo su propia historia: la del primer argentino en la F1 en más de dos décadas, decidido a ganarse un lugar entre los mejores del mundo.
