En un acto de cierre de campaña, asesinaron a un candidato a alcalde en Guerrero. México está asolado por la violencia del crimen organizado. En esta lucha electoral ya mataron a 29 candidatos. El domingo se realizarán las elecciones generales.
La violencia política en México no se detiene. Asesinaron a tiros a José Alfredo Cabrera Barrientos, candidato a la alcaldía de Coyuca de Benítez, en el estado de Guerrero. Son ya 29 los candidatos que el crimen organizado mató solo en esta campaña electoral.
El próximo domingo 2 de junio, casi 100 millones de mexicanos están empadronados para votar en elecciones generales, en que se juega la presidencia del país y todos los cargos ejecutivos de los estados e intendencias.
El presidente Andrés Manuel López Obrador no puede ser reelecto, pero la candidata del oficialismo es favorita en un clima dominado por la violencia política.
José Alfredo Cabrera ponía punto final a su campaña para ser intendente de Coyuca de Benítez, en el estado de Guerrero, en México. Luego de hablar ante sus seguidores se quedó junto a ellos durante unos minutos. Lo saludaban y se sacaban fotografías con él. Como ya estamos habituados, los celulares se transformaron en una cámara de fotos o de grabación al instante. Gracias a esto, se pudo registrar la desgarradora escena del asesinato.
Cabrera termina de saludar a una persona y gira para comenzar a caminar. En ese momento se ve que -por la derecha de la persona que está grabando con su celular- aparece una mano empuñando un arma en dirección a la cabeza del candidato y dispara.
El momento causa una conmoción inmediata. La gente comienza gritar y -mientras algunos se alejan como pueden- otros tratan de dar asistencia a Cabrera, herido de muerte. El propio responsable de registrar ese momento caótico tuvo muchos problemas para poder enfocar su celular de manera apta como para seguir los momentos finales del candidato.
El asesinato de Cabrera es el número 29, tan solo registrando los momentos de esta campaña electoral. Una prueba del enorme poder y la sensación de impunidad que tienen los integrantes de los grupos narcos y del crimen organizado. No solo con lo que siempre se sospecha y cada tanto se compueba como el "financiamiento" a determinados candidatos.
Cada vez con mayor frecuencia, cuando un candidato habla abiertamente de enfrentarlos, se sabe que eso equivale casi a que quede marcado por los criminales como una víctima que será ejecutada, tarde o temprano.
Este asesinato es una clara muestra de que los sicarios tienen el respaldo necesario para actuar. A Cabrera lo mataron en el cierre de la campaña, el momento culminante y cuando más interés y seguridad hay sobre cualquier candidato. Sin embargo, todo parece ser inútil cuando está en la mira de los sicarios.
Guerrero era el candidato de la coalición opositora que integran el PRI-PAN-PRD, históricos partidos en el poder de México hasta la irrupción de MORENA con López Obrador.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, fue quien confirmó la muerte del candidato y ordenó a la fiscalía estatal investigar los hechos. Como primer dato, se dijo que uno de los agresores fue abatido por la policía. Aunque no se precisó si fue el que disparó el arma o si era uno de los cómplices.
En ese estado de violencia e impunidad de los sicarios, el próximo domingo casi 100 millones de mexicanos elegirán a su nuevo presidente. Es la nación de habla hispana con mayor cantidad de población en todo el mundo.
