La reina Isabel II llega en helicóptero a su residencia en Sandringham (Foto: Gentileza revista Hola!)
Que nada arruine la una celebración única: el jubileo de platino. Los 70 años en el trono de la reina Isabel II. Esa es la prioridad absoluta para la Corona británica. Llegó en avión al castillo de Sandringham, una de las tantas residencias de la Casa de Windsor, ubicada en el noreste de Inglaterra. La reina dejó una temporada de 4 meses en el castillo de Windsor, en las afueras de Londres.
Isabel II cumplirá 70 años en el trono británico. Algo que jamás sucedió en una historia de siglos. Será un largo festejo ya que Isabel fue reina de Gran Bretaña cuando el 6 de febrero de 1952 murió su padre y heredó el trono. Pero la coronación oficial fue un año después, el 2 de junio de 1953. Por eso, la celebración íntima comienza en pocos días, pero la celebración nacional será del 2 al 6 de junio.
La Reina tiene 95 años y hasta octubre del año pasado realizaba una vida muy activa. Pero una indisposición terminó en una intervención quirúrgica, justo antes de la COP26, la cumbre del clima en Glasgow, de la que iba a ser la anfitriona.
Desde entonces, solo se la vio esporádicamente. Los médicos de la casa real la pusieron bajo un estricto plan de cuidados para preservar su salud y lograr que llegué a celebrar el jubileo de platino.
Luego de la operación, Isabel II dejó el palacio de Buckingham. Suspendió toda su agenda y se recluyó en Windsor, a 40 km. al oeste de Londres. Allí, se la vio una vez, para demostrar que se recuperaba en gran forma. Recibió la despedida del jefe del estado mayor de las fuerzas armadas. Gesto protocolar que sirvió para verla parada y caminar ( sin bastón) y hasta escuchar su característica fina pero firme voz.
Incluso hizo una broma con el militar, ya que Isabel II es conocida por ser tan exigente y drástica como por tener un fino sentido del humor.
El viaje a Sandringham también tiene un claro mensaje para los súbditos británicos. Voló en helicóptero los 182 km. que separan esa residencia de Londres.
La familia real británica cumple con una añeja tradición. Allí pasa las vacaciones por la navidad y el año nuevo. Luego de la celebración de reyes, Isabel II regresa al palacio de Buckingham, para atender sus asuntos como jefa de estado.
Pero este año, todo fue distinto. El 9 de abril de 1921, murió su esposo Felipe, el duque de Edimburgo con quien estuvo 73 años casada. La reina estaba aislada por la tercera ola de coronavirus. En octubre, la operación. Ambos hechos hicieron que la monarca no fuera con los demás integrantes de su familia a despedir el año viejo y recibir el año nuevo en Sandringham.
Ahora, ya repuesta, está en condiciones de cumplir, con demora, esa tradición. Mientras sigue resguardada para el jubileo de platino
Sandringham tiene otra historia muy particular. En 1991, la princesa Diana Spencer, tomó una decisión de gran impacto en la familia real y en el mundo. Harta de vivir una pesadilla, decidió que se separaría de su marido, el príncipe Carlos, eterno heredero del trono de Isabel II.
La película "Spencer", estrenada a fines de 2021, relata la decisión que tomó Lady Di luego de tres días en Sandringham. Por su actuación, la actriz norteamericana Kristen Stewart es favorita a ganar el premio Oscar.
Lady Di, en Sandringham rompió cualquier posibilidad de ser reina consorte. En el mismo lugar, Isabel II, en cambio, aguarda celebrar sus 70 años como monarca.
