En la de Nueva York, Columbia y también en Yale gana espacio la confrontación entre propalestinos y partidarios del gobierno israelí. Cuáles son los temores de las autoridades.
Estudiantes de la NYU (Universidad de Nueva York) cara a cara con la policía (Foto: gentileza The Mirror).
Como si fuera un "revival" de la década del 60, cada vez más universitarios en Estados Unidos protestan contra la guerra. Pero esta vez no es por Vietnam y las tropas norteamericanas. Se trata del conflicto entre Israel y Hamas, que amenaza la paz en los campus y centros universitarios en este ciclo lectivo.
Este lunes se repitieron las protestas que dejaron un saldo de más de 100 estudiantes detenidos por la policía. Especialmente entre aquellos que se consideran más radicalizados en su opción propalestina. Son muchos los alumnos judíos y profesores que ya denunciaron graves casos de discriminación y antisemitismo.
El tema va escalando y ya llegó hasta Washington. Los campus se van transformando en lugares de enfrentamientos cada vez más radicalizados por lo que el presidente Joe Biden condenó esos actos contra judíos en las universidades (muchas de ellas de élite) y demanda que las autoridades de las casas de estudio recuperen el control dentro de sus organizaciones.
Varias de las universidades, agrupadas en la llamada "Ivy League", iniciaron estas confrontaciones por la acción de los grupos propalestinos. Pero en pocas semanas fue creciendo y se extiende por todo el país. En Nueva York, no solo la Universidad de Columbia (una de las top del país) está convulsionada.
Columbia está en la zona norte de la ciudad, al oeste de Harlem. Pero este lunes, las protestas se instalaron en el centro sur de Manhattan. La New York University (NYU) está en el Village, un lugar privilegiado de la ciudad y frecuentemente visitado por turistas de todo el mundo.
Los universitarios se manifestaron y protagonizaron enfrentamientos con la policía. Se produjeron encontronazos y varias detenciones en las adyacencias de esa casa de estudios.
La Universidad de Columbia mantuvo cerradas las puertas de sus aulas este lunes y transfirió las conferencias en línea (virtuales, como en pandemia) e instó a los estudiantes a quedarse en casa. Es por este tema que hay pedidos de renuncia a su presidenta, "Mimouche" Shafik. Nacida en Alejandría, Egipto, se la señala como no hacer todo lo necesario para restablecer la vida de estudio y evitar los casos de antisemitismo.
En Yale, en New Haven, también volvieron a presentarse más protestas de los grupos propalestinos. Exigen que Israel se retire de la Franja de Gaza y que Estados Unidos deje de apoyar al gobierno de Benjamín Netanyahu hasta que cambie esa situación. En Yale, que también forma parte de las universidades más prestigiosas, la policía identificó con brazaletes a algunos universitarios que ya recibieron cédulas judiciales para responder por "invasión a la propiedad privada", como armar campamentos en los campus de la Universidad.
En la costa oeste surgió un nuevo campamento en la Universidad de California, Berkeley. Otra de las más calificadas en el país. Los campus se han convertido en terrenos propicios para marchas, y hasta los "acampes" que tanto conocemos en la Argentina. Es por eso, que las autoridades universitarias han pedido la ayuda a la policía para despejar esas carpas. Pero la resistencia de los estudiantes viene provocando constantes roces con las fuerzas de seguridad.
Si no hay una solución en el conflicto entre Israel y palestinos en Gaza, las universidades de Estados Unidos ven con preocupación el resto del curso en este ciclo lectivo. Ni siquiera la participación de los presidentes y directivos de las universidades ante una comisión del Congreso en Washington parecen ser suficientes para calmar las protestas.
Las autoridades educativas dan casi por seguro que las manifestaciones, de una forma u otra, durarán en algunos campus hasta el final del año académico. Temen que, entonces, las tradicionales ceremonias de graduación, de enorme alegría y festejos, queden relegadas por las disputas entre grupos a favor de Palestina y otros a favor de Israel.