Evacuados y ayuda humanitaria
Volodimir Zelenski pidió la ayuda en carácter urgentísimo a las Naciones Unidas para evacuar a los habitantes que aún permanecen en Mariúpol, la ciudad en el este de Ucrania sobre el mar de Azov. El secretario general de la ONU, António Guterres, confirmó que un tercer grupo de micros logró dejar la ciudad devastada. En concreto, 500 civiles dejaron el infierno de Mariúpol en busca que algo de paz, aunque perdieron su hogar y sus pertenencias.
Andriy Iermak, jefe de la oficina del presidente ucranio, confirmó que este viernes, es el día elegido para intentar un nuevo operativo en la acería de Azovstal. Acciones similares, en estas semanas resultaron imposibles por el recrudecimiento de los bombardeos rusos.
Al mismo tiempo, la fuerza aérea rusa aparece como una parte activa en esta fase de la guerra. Hasta ahora, los misiles personales entregados a Ucrania habían logrado contener a los aviones rusos. Pero el Kremlin comunicó que se destruyeron varias aeronaves y la pista de un aeródromo cerca de Kirovogrado y en Konakovo, la pista aérea de la ciudad de Nikolaev.
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Mientras Rusia se concentra en el este de Ucrania y Mariupol, kiev lanza una contraofensiva desde Jarkiv (Foto: Archivo)
Ucrania contraataca
En Kiev, ponen en acento en otra zona del país. En las últimas horas, con el armamento que va llegando desde europa y Estados Unidos, Ucrania quiere retomar el control de ciudades del este de su país. En concreto, los militares ucranianos atacaron posiciones rusas en Jarkiv e Izium.
Las formaciones ucranianas comenzaron a avanzar hacia el noreste desde Jarkiv, ubicada a solo 40 kilómetros de la frontera con Rusia. Según las fuentes de Ucrania, lograron hacer que las tropas rusas se retiren más hacia el este a través del río Donets.
En tanto, la ofensiva de Izium podría ser el preludio de un desastre para los rusos. Diez semanas después de la guerra más amplia de Rusia contra Ucrania, el ejército ruso está exhausto según las agencias de inteligencias norteamericanas. Rusia siente la escasez de recursos económicos y no puede proveer de la logística necesaria - armas y alimentos también - a las tropas más adentradas en terreno ucraniano.
Siempre según las agencias de inteligencia de Estados Unidos o desde Kiev se dice que los mejores batallones están destrozados. Muchos de sus principales comandantes están muertos. Esto anima al gobierno de Ucrania para iniciar una contraofensiva.
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Jarkiv, con edificios destruidos, base de la contraofensiva de Ucrania (Foto: AP)
Volodimir Zelenski siempre repite que está abierto a una reunión cara a cara con Vladimir Putin. Pero ningún tema debe quedar fuera de negociación. Si Ucrania renuncia a incorporarse a la OTAN, lo mínimo que pretende es recuperar la totalidad de su territorio. Incluído Crimea y la región del Donbás.
Para eso necesita lograr en el este del país algo similar a lo que ocurrió en abril en Kiev. El ejército ruso no pudo avanzar ni tomar la capital del país. El resultado: abandonaron el asedio para centrarse en el este de Ucrania.
Ahora , las tropas de Zelenski quieren hacer lo mismo en esa región del país o sea, lograr que los rusos retrocedan. Pero este fin de semana es clave para la guerra. Especialmente para ver cómo llega Vladimir Putin a la plaza roja el próximo lunes 9 de mayo.
