Guzmán había anticipado su renuncia durante una reunión que mantuvo con Alberto Fernández el jueves (Foto: archivo).
Luego de dos años y medio en su cargo, el ministro de Economía, Martín Guzmán, le presentó su renuncia este sábado al presidente Alberto Fernández. Primero lo hizo a través de una comunicación telefónica, poco antes de publicar la carta oficial de dimisión en sus redes sociales, que difundió en simultáneo al discurso que pronunciaba la vicepresidenta, Cristina Kirchner, en un acto en homenaje a Juan Domingo Perón en Ensenada.
"La falta de acuerdo político y las trabas en la toma de decisiones imposibilitaban aplicar como correspondía las herramientas de política económica previstas", señalaron a A24.com fuentes muy cercanas al saliente ministro, cuya decisión tomó por sorpresa a buena parte del Gobierno, que hasta el viernes seguía sosteniendo al equipo económico pese a los duros cruces políticos entre el ala que responde al presidente Alberto Fernández y al kirchnerismo.
Guzmán le comunicó a Alberto Fernández que es una decisión que venía meditando desde hacía un tiempo, debido a "las diferencias políticas en la coalición" de gobierno y "las trabas que ponían algunos funcionarios" que no respondían a la línea trazada por Guzmán y el Presidente, como el plan económico acordado con el FMI, la segmentación de tarifas o la necesidad de cumplir las metas de déficit fiscal. Estos mismos argumentos, Guzmán los había expuesto durante una reunión que mantuvo con Fernández el último jueves.
La decisión de renunciar, según supo A24.com, era un proceso que venía meditando y quedó plasmado en una extensa carta de 7 páginas en la que el ahora exministro realizó un balance de gestión y una ratificación de su convencimiento sobre la visión de la crisis económica argentina.
Sin embargo, la idea de abandonar el Gobierno terminó de definirla este sábado, en medio del discurso de la vicepresidenta Cristina Kirchner, que volvió a plantear críticas al rumbo económico y reclamó políticas concretas a las que Guzmán se oponía, como implementar un Salario Básico Universal para 7 millones de desocupados, que implicaría un gasto del 3 % del PBI.
Cristina Kirchner también cuestionó la política monetaria y cambiaria del equipo económico, en un fin de semana en que el clima de incertidumbre se potenció en el Gobierno y nadie descartaba nuevos o más cambios de gabinete.
Según trascendió, el Presidente se encontraba en la noche de este sábado reunido en la residencia de Olivos con sus funcionarios más cercanos.
El titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, uno de los dirigentes que habló en las últimas semanas con él reclamando cambios estructurales del gabinete y en el equipo económico, también recibió con sorpresa la dimisión de Guzmán. Massa era justamente uno de los dirigentes más mencionados en los últimos días para asumir un cargo importante en el gabinete nacional.
Cerca del titular de Diputados y tercera pata de la coalición de gobierno indicaron a A24.com que "Massa estaba en la cancha viendo el partido de Tigre y no tenía celular. Se enteró de la noticia cuando salió".
Desde el entorno de Alberto Fernández evitaban hablar de nombres, y admitían que la decisión de Guzmán los tomó por sorpresa.
La renuncia de Guzmán abre de esta manera una nueva crisis de gabinete, la tercera de estas proporciones que sufre el Gobierno en medio de la dura interna del Frente de Todos.
La definición del reemplazo de Guzmán abre la posibilidad de nuevas negociaciones de Alberto Fernández con Massa y con Cristina Kirchner. De todos modos, lo que está ahora en juego es que pasará el lunes cuando abran los mercados. Ante ese escenario, todo indica que el nombre del reemplazante de Guzmán se conocerá en las próximas horas.
