Casa Rosada

Salarios: el Gobierno intenta contener las negociaciones paritarias ante una inflación que no cede

Tras cerrar las paritarias docentes, el Gobierno busca acuerdos salariales que no superen el 60% en 2023, pero admite la posibilidad de reabrir paritarias si la inflación supera las metas acordadas con el FMI.
Stella Gárnica
por Stella Gárnica |
El Gobierno apuesta a paritarias que no superen aumentos del 60 % en 2023

El Gobierno apuesta a paritarias que no superen aumentos del 60 % en 2023, y pone como ejemplo a los docentes. También promete cumplir las metas de inflación y del FMI. Foto: Ministerio de Tabajo.

El Gobierno nacional insiste en poner como tope a las negociaciones paritarias un 60% de aumento proyectado para este año 2023, pese a que la inflación de enero superó las expectativas inflacionarias. Confía en poder cumplir el plan de Sergio Massa para no tener que modificar las metas firmadas con el FMI. En caso de no lograrlo, desde el Ministerio de Trabajo admitieron que están dispuestos a reabrir las paritarias a mediados de año, como lo hicieron en 2022, con acuerdos que alcanzaron en algunos casos el 100%.

En esa puja se encuentran los sindicatos de docentes, bancarios, petroleros, construcción, comercio, metalúrgicos, farmacia, empleados de seguro, de la industria láctea y de la carne que ya abrieron sus paritarias 2023; con los acuerdos conseguidos para el primer semestre de este año, marcaron la hoja de ruta que prepara el ministro de Economía y la de Trabajo, Kelly Olmos, tratando que no se desbanden las demás variables.

Aunque en muchos casos se pide recomposición salarial y un aumento por encima de la inflación, los trabajadores registrados se encuentran en un profundo reclamo ante la situación económica del país, debido a la brusca pérdida del poder adquisitivo, que en enero acumuló un 6%; las perspectivas para febrero no son mejores, teniendo en cuenta los aumentos de tarifas de servicios públicos que se vienen, de combustibles, y los efectos que la sequía podría generar en la cadena alimenticia y la canasta familiar.

Sobre todo en un año que se espera tenso por la campaña electoral que arranca entre marzo y abril, el Gobierno apura los acuerdos salariales mostrando las cartas y la posibilidad de apoyar reapertura de negociaciones si la inflación llegara a superar el 60%.

"Si no logramos quebrar la alta inflación vamos a convocar a la reapertura de paritarias", dijo la ministra Kelly Olmos luego de cerrar el pasado viernes acuerdos con los sectores de docentes nucleados en la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA); el Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP); la Unión de Docentes Argentinos (UDA); la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y, la Confederación de Educadores Argentinos (CEA).

Paritaria docente. El presidente Alberto Fernández y los ministros de Educación, de Economía y de Trabajo cerraron el acuerdo con los gremios. Foto Min, de Trabajo.jpg

Con la presencia del presidente Alberto Fernández, los ministros Sergio Massa, Olmos y Perczyk, el gobierno promocionó la paritaria para los docentes nacionales con un 33,5% de aumento para el primer semestre de este año, que se pagará en tres tramos: marzo, mayo y junio.

Esa modalidad de pago escalonado no es una opción favorable a los empleados que ven perder ante la inflación mensual, que de seguir al ritmo actual, superaría lejos el 60 % proyectado en las metas del Presupuesto nacional y el acuerdo con el FMI.

En ese marco, el ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk prometió "fortalecer el fondo de compensación salarial para que ningún docente del país que recién se inicia quede por debajo de los $130 mil de salario”.

"ASpectos horizontales"

“Estamos trabajando en aspectos horizontales para mejorar el ingreso de los trabajadores", sostuvo la ministra de Trabajo. La idea es poder ofrecer beneficios por fuera del salario formal para poder ayudar a los bolsillos sin que se dispare el índice.

Massa anunció la suba del mínimo no imponible de ganancias y del tope salarial para que más trabajadores reciban la ayuda de asignaciones familiares.

"La meta de inflación de 30 puntos se mantiene vigente. Ese es el parámetro y no nos oponemos que los sectores puedan buscar algún punto adicional de recomposición”, aclaró olmos. “Tuvimos un impacto difícil en enero pero eso no implica que cambie la meta. Desde el ministerio de Trabajo impulsamos la reapertura de paritarias y los trabajadores registrados quedaron medio punto abajo de inflación", agregó.

Los datos del INDEC sobre empleo

Un nuevo informe dado a conocer este miércoles por el INDEC, indica que en el total urbano de la Argentina (ciudades de más de 2000 habitantes), el ingreso medio de la ocupación principal de la población asalariada con descuento jubilatorio fue $102.247, con una brecha de 56,8% con respecto a los asalariados sin descuento jubilatorio.

https://twitter.com/INDECArgentina/status/1628470183172898819

Sin embargo, el último informe dado a conocer por el INDEC, indica que el promedio de ingresos de los trabajadores asalariados es de $76.375 y sigue muy lejos de cubrir la canasta básica de alimentos, que supera los $163.000.

El índice de salario no registrado se hace a través de la EPH, que es un promedio con 3 meses de atraso.El trabajo en las aplicaciones no tiene que estar desprovisto de derechos. El año pasado hubo un pico inflacionario y fue el gobierno el que convocó a reabrir las paritarias.

"Estamos en récord histórico en creación de trabajo y en inversión sobre el PBI. Es importante quebrar la inflación. Los trabajadores no registrados quedaron abajo de la inflación. Los salarios corren atrás de los precios", admiten en la Casa Rosada que sigue oponiéndose a otorgar una suma fija de aumento salarial para los sectores privados, como reclaman los socios del kirchnerismo.

"La suma fija la hemos utilizado cuando salimos de procesos largos de no paritaria. Si ponemos un aumento de suma fija, le quitamos poder a la negociación salarial y no va a mejorar la capacidad adquisitiva", ratificó Olmos, que la decisión de Alberto Fernández es continuar con la misma línea de su anterior ministro de Trabajo, Claudio Moroni.

En la Casa Rosada admiten que es difícil reducir la inflación por la expectativa que genera el año electoral, y defienden la gestión al señalar que este año, pospandemia hubo generación récord de fuentes de trabajo.

El desempleo retrocedió al 6,7% en el tercer trimestre de 2022 y se consolida así la tendencia de descenso que comenzó tras el salto del 2020 por la pandemia. Según la encuesta de hogares difundida por el INDEC, en el mismo trimestre del 2021 la desocupación se ubicaba en el 7,9% de la población activa.