La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) anunció que pagará un bono mensual de $200.000 durante seis meses destinado a los trabajadores desempleados que perdieron su empleo sin justa causa.
El Gobierno nacional, a través de la ANSES, confirmó un nuevo refuerzo económico para familias. Cuáles son los requisitos, cómo tramitarlo y quiénes pueden acceder.
La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) anunció que pagará un bono mensual de $200.000 durante seis meses destinado a los trabajadores desempleados que perdieron su empleo sin justa causa.
La medida busca garantizar el acceso a la canasta básica en un contexto de caída del empleo formal y alta inflación, y se enmarca dentro del programa Prestación por Desempleo, un beneficio vigente desde hace años pero que ahora se refuerza con nuevos montos y plazos ampliados.
El anuncio llega tras las elecciones nacionales, en medio de una nueva etapa económica donde el Gobierno de Javier Milei busca sostener los ingresos de los sectores más vulnerables mientras continúa la transición de políticas sociales y laborales.
La Prestación por Desempleo es una ayuda económica que ANSES otorga a los trabajadores despedidos sin justa causa, para garantizarles un ingreso mensual mientras buscan un nuevo empleo formal.
El beneficio se abona en cuotas mensuales durante un período que puede ir de dos a doce meses, dependiendo de los años trabajados con aportes. En algunos casos, puede extenderse hasta 18 meses, como sucede con los mayores de 45 años.
Este subsidio es compatible con el uso de programas de reinserción laboral, formación profesional y otras políticas activas del Ministerio de Capital Humano, que acompaña la medida.
Según la información oficial, los beneficiarios podrán acceder a hasta $200.000 mensuales durante seis meses consecutivos, aunque el monto final depende de los sueldos percibidos en los meses previos al despido.
El cálculo se realiza tomando como referencia el 75% del mejor salario cobrado durante los últimos seis meses de trabajo.
De todos modos, la normativa establece límites mínimos y máximos:
Monto mínimo: equivalente al 50% del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), es decir, $161.000 en noviembre de 2025.
Monto máximo: equivalente al 100% del SMVM, es decir, $322.200.
Por esa razón, la mayoría de los beneficiarios percibirán un monto promedio cercano a los $200.000, dependiendo de su situación laboral anterior.
El beneficio está destinado exclusivamente a los trabajadores registrados en relación de dependencia que fueron despedidos sin justa causa, o cuya relación laboral se extinguió por causas ajenas a su voluntad (como quiebra del empleador o vencimiento de contrato a plazo fijo).
ANSES diferencia los requisitos según el tipo de relación laboral previa:
Trabajadores permanentes
Haber trabajado al menos 6 meses con aportes en los últimos 3 años previos al despido o finalización del contrato.
Trabajadores eventuales o de temporada
Haber trabajado menos de 12 meses en los últimos tres años, pero más de 90 días durante el último año antes del cese del trabajo.
El trámite debe iniciarse dentro de los 90 días posteriores al despido. Si se presenta fuera de ese plazo, los meses de demora se descuentan del período total de cobro.
Para iniciar el trámite, el interesado debe presentar una serie de documentos que acrediten la desvinculación laboral y su identidad.
El proceso puede hacerse de manera presencial con turno previo en las oficinas de ANSES, o virtualmente a través del sitio web oficial.
Documentación obligatoria:
DNI (original y copia).
Telegrama o carta documento de despido o documentación equivalente.
Datos bancarios actualizados (CBU de cuenta a nombre del solicitante).
En caso de despido por causas especiales, se requiere documentación adicional, como se detalla más abajo.
Cada solicitante debe acreditar su situación con documentos específicos. ANSES reconoce varias causas válidas para acceder a la Prestación por Desempleo:
Despido sin justa causa: telegrama o carta documento del empleador notificando la desvinculación.
Despido por quiebra o concurso del empleador: nota del síndico o sentencia judicial que confirme la disolución del contrato laboral.
Denuncia del trabajador por justa causa: telegrama de intimación y de desvinculación enviados por el trabajador.
No renovación de contrato a plazo fijo: copia del contrato vencido.
Fallecimiento del empleador unipersonal: copia certificada del acta o partida de defunción.
Cese laboral por enfermedad o accidente: certificado médico de aptitud laboral que acredite la imposibilidad de continuar con el empleo.
El trámite se puede hacer de dos formas, según la preferencia del solicitante:
Opción 1: En línea
Ingresar a www.anses.gob.ar con Clave de la Seguridad Social.
Ir a la sección “Prestación por Desempleo”.
Cargar los datos personales y laborales.
Adjuntar la documentación en formato PDF o imagen.
Enviar la solicitud y esperar la confirmación del organismo.
Opción 2: Presencial con turno
Solicitar turno previo desde la web de ANSES.
Presentarse el día asignado con toda la documentación.
Firmar la solicitud y declarar la situación laboral.
Una vez aprobada, el pago se deposita en la cuenta bancaria registrada.
El seguimiento del trámite puede hacerse desde el apartado “Mi ANSES > Consultas > Estado de trámite”.
Para entender cómo se determina el monto, supongamos el caso de un trabajador que en los últimos seis meses percibió un salario promedio de $250.000.
75% del mejor sueldo: $187.500
Si el SMVM vigente es $322.200, el monto se ajusta y queda entre el mínimo y máximo establecidos.
El beneficiario cobrará $187.500 por mes, por un período inicial de 6 meses, que puede extenderse si cumple los requisitos.
En total, percibiría $1.125.000 en seis meses, sin contar los aumentos del salario mínimo que ajustan automáticamente el beneficio.
Los trabajadores mayores de 45 años que accedan a la Prestación por Desempleo podrán extender el cobro hasta 18 meses, siempre que mantengan la condición de desempleo y no hayan rechazado ofertas laborales formales durante ese período.
Esta prórroga se otorga de manera automática, sin necesidad de iniciar un nuevo trámite, y busca brindar una red de contención a un grupo etario con más dificultades para reinsertarse laboralmente.