Oración por la paz difundida por el papa León XIV
Santísima Virgen María Reina
¡Oh, María!, madre de Dios y madre nuestra, nosotros, en esta hora de tribulaciones, recurrimos a ti. Nosotros hemos perdido la vía de la paz. Nos hemos enfermado de avidez, nos hemos recluido en intereses nacionalistas... Hemos preferido ignorar a Dios, convivir con nuestras falsedades, alimentar la agresividad, suprimir vidas y acumular armas, olvidándonos de que somos custodios de nuestro prójimo y de la misma casa común.
Hemos arruinado con la guerra el jardín de la Tierra. Hemos herido con el pecado el corazón de nuestro Padre, que nos quiere hermanos y hermanas.
En la miseria del pecado, en nuestras fatigas y fragilidad, en el misterio de la iniquidad del mal y de la guerra, tú, Madre santa, nos recuerdas que Dios no nos abandona, pero continúa mirándonos con amor, deseoso de perdonarnos y realzarnos.
Extingue el odio, aplaca la venganza, enséñanos el perdón. Libéranos de la guerra, preserva al mundo de la amenaza nuclear. Que tu llanto, oh Madre, mueva nuestros corazones endurecidos.
Mientras el rumor de las armas no calla, tu oración nos disponga a la paz. Que tus manos maternas acaricien a cuantos sufren y huyen bajo el peso de las bombas. Tu abrazo materno consuele a los que están obligados a dejar sus casas y su país.
Que tu corazón dolorido nos mueva a la compasión.
Amén