En un comunicado, el grupo señaló que con esta acción de “desobediencia civil no violenta” quiere denunciar el continuismo por parte del Gobierno de las políticas que agravan la crisis climática, “así como la desigual responsabilidad en la misma”.
Miembros del grupo Futuro Vegetal divulgaron imágenes frente a la casa cerca de Cala Tarida, en la costa oeste de Ibiza, con una bandera con la leyenda, en inglés, "Ayuda al planeta, cómete un rico. Abolir la policía". Luego aparecen los dos activistas lanzando pintura roja y negra a la fachada blanca del inmueble.
El grupo dijo en un comunicado que quería evidenciar el papel "de los ricos en la crisis climática", al atacar la mansión que aseguran es "una construcción ilegal".
Futuro Vegetal citó un informe de Oxfam de 2003 según el cual "el 1% más rico de la población mundial generó en 2019 la misma cantidad de emisiones de carbono que los dos tercios más pobres de la humanidad, pese a que son precisamente las comunidades más vulnerables quienes padecen las peores consecuencias de la crisis".